TAPIE DA LECCIONES DE MORAL EN TELEVISIÓN

Bernard Tapie, ex ministro, ex empresario, ex presidente del Olympique de Marsella, ex propietario de un equipo ciclista, ex actor, ex presidiario y contumaz defraudador al fisco es el nuevo presentador estrella de la televisión privada francesa. El pasado lunes debutó como animador de una emisión de debate titulada A tort ou à raison que aborda temas de sociedad y en la que Tapie discute con una serie de expertos. La reglamentación o la prohibición pura y simple de la prostitución fueron las alternativas sometidas a discusión. Tapie defendió una 'ley seca' para el oficio más viejo del mundo en nombre del 'orden público' y, sobre todo, para 'luchar contra una forma de esclavismo moderno'. Él, que ha intervenido en varios escándalos de compra y venta de jugadores de fútbol y de partidos, se mostró intratable sobre la cuestión: 'Estamos hablando de bandidos que explotan a mujeres indefensas y convierten el amor en mercancía'. Maquillado a fondo, teñido de rubio hasta la última cana y con ganas de explotar su verborrea, Tapie no pudo con otra 'excepción francesa': la puta intelectual. Claire Carthonnet, 'trabajadora del sexo', se ganó al público cuando dijo que 'nadie escoge ser puta como nadie escoge ser cajera de supermercado o descargador del puerto. Una se encuentra ejerciendo el oficio y basta'. Tapie quiso hacerle ver que había algo turbio en su manera tan objetiva de hablar del oficio. 'El señor Sollers escribe y se gana el dinero con su cerebro; el decorador de este programa se lo gana con sus manos; yo me lo gano con mi sexo. No creo que haya una parte del cuerpo que sea mejor o más noble que la otra', concluyó Carthonnet. El voto telefónico del confirmó el punto de vista de Carthonnet: un 68% a favor de reglamentar la prostitución y un 32% partidario de la prohibición a ultranza aplicada por los suecos y defendida por Tapie.-