Los viajes de dos liberales de Xàtiva

Las biografías y estudios sobre vidas de apasionados viajeros e intelectuales ilustrados del siglo XVIII siguen ofreciendo novedades. El último trabajo editado por la Biblioteca Valenciana es El viaje literario y político de los hermanos Villanueva, que ha realizado el profesor de la Universidad de Alicante Emilio Soler. Los protagonistas son Joaquín Lorenzo y Jaime, dos hermanos de una saga familiar de origen aragonés e italiano, que se asientan en Xàtiva y que recorren entre 1802 y 1806 todas las iglesias de España.

'Lamentamblemente la ideología política liberal de éstos hace que la obra esté inacabada y maldita', explica el historiador, quien ha analizado los 22 tomos que se conservan de estos viajes, y que sólo incluyen información referente a los templos de Cataluña, País Valenciano y Baleares. 'El resto se perdió en la Guerra de Indepencia', agregó Soler, que presentará su último libro el 5 de noviembre en el Monasterio de San Miguel de los Reyes en Valencia.

La vida de estos hermanos es de película. Joaquín Lorenzo Villanueva, hombre bien situado en la Corte, del grupo de los jansenistas españoles, era conocido por ser un virulento antijesuita.'El viaje literario no es sólo una historia de la liturgia, es algo más', asegura Emilio Soler, que recuerda cómo Jaime Villanueva fue un gran investigador. 'Por eso, cuando se enfrenta a los archivos, no busca sólo la liturgia, sino la historia de la zona, las obras de arte, habla de las reliquias, con mucho sentido del humor, porque Jaime, como buen dominico, no cree demasiado en las reliquias', matizó.

El trabajo que ahora rescata Emilio Soler es una fuente de primera mano para conocer la historia antigua de las diócesis. Joaquín Lorenzo, pese a ser un conservador al principio de su vida intelectual y pertenecer incluso a la Inquisición, es un hombre que en 1810 cambia su ideología, es elegido diputado por Xàtiva a las Cortes de Cádiz, se incorpora allí y se lleva a su hermano Jaime, a quien hace cronista del diario de sesiones, explica Soler. Joaquín Lorenzo se oponía a las ideas que venían de la Revolución Francesa, pero en Cádiz se alía y relaciona con el sector más liberal. 'A este sector radical le interesa, porque en temas como la reducción de órdenes religiosas, la expulsión de los jesuitas y la abolición de la Inquisición tienen en él un valedor'.

En 1814, con el reinado de Fernando VII, Jaime es confinado en su orden dominica, y Joaquín Lorenzo es desterrado al convento de la Salceda en la Alcarría (Guadalajara), hasta que en 1820 el golpe del general Manuel del Riego hace que las ideas liberales gobiernen en España. Joaquín Lorenzo sale de la cárcel y vuelve a ser diputado en Madrid por Valencia, reclama a su hermano y, al tiempo, es nombrado embajador ante el Vaticano, pero como él, en el periodo liberal, escribió obras contra el poder del papado romano, cuando llega a Italia el Vaticano le veta la entrada y le niega el rango de embajador. Tiene que volver a España, y su retorno genera una grave crisis entre el Gobierno Liberal Español y la Santa Sede hasta tal punto que el nuncio apostólico de Madrid es invitado a salir de España.

Cuando acaba el perido liberal en 1823, los hermanos Villanueva se exilian a Inglaterra; allí fundan la revista Ocios de españoles emigrados, y los dos mueren en el exilio. 'Por eso se dice de ellos que en el cielo no los quisieron por liberales, y en infierno por clérigos'. En el libro, Emilio Soler hace un estudio biográfico de los hermanos, y resume los 22 volúmenes destacando la aportación artística y literaria de estos viajes.

Desde el punto de vista historiográfico Joaquín Lorenzo Villanueva destaca por redactar y publicar más de cien obras literarias, entre ellos varios libros de viajes y ensayos como La vida literaria, en la que repasa desde su punto de vista los principales acontecimientos políticos de España entre los siglos XVIII y XIX. Su hermano Jaime destaca por recorrer todas las iglesias.