'Usar la Diputación con fines partidistas sería una deslealtad'

Francisco Pulido (Almedinilla, Córdoba, 1962) ha llegado de repente a la presidencia de la Diputación cordobesa, regida por un pacto PSOE-IU, cuando sólo faltan ocho meses para el fin del mandato. Y tiene sentimientos contradictorios: 'Asumo el trabajo con ilusión', dice, 'pero la situación en que lo hago no es agradable'. Se refiere a las circunstancias en que su antecesor dejó el cargo: Matías González dimitió cuando se le acusó de haber contratado de forma irregular a una mujer a la que le unía una relación personal.

'El presidente actuó con rapidez: presentó su dimisión cuando la investigación estaba en sus inicios y sólo había diligencias previas', señala. 'Eso denota gran respeto por la institución, por el partido al que representa y por los ciudadanos. Ojalá otros partidos tuviesen esa misma actitud y se mostrasen igualmente generosos y al servicio de la sociedad'.

Esta sugerencia parece ir dirigida al PP. 'Sí, espero que hagan oposición sin dejarse influir por este período preelectoral. Como les decía en el discurso de investidura, quiero que sean exigentes, pero que apliquen el mismo nivel de exigencia a su propio grupo, que no se dejen llevar por el momento. Tenemos que trabajar hasta el último día por lo que nos encomendaron los ciudadanos. Esa es nuestra labor, y usar la Diputación con fines partidistas sería una deslealtad. La institución no debe utilizarse para tapar o resolver los problemas que pueda tener cualquier partido'.

Para Pulido, el balance de estos tres años es satisfactorio, y defiende la necesidad de continuar en la misma línea, 'pero sin conformismo', advierte. Las cuatro claves de este proyecto, enumera, son el empleo, el desarrollo económico, las infraestructuras y las políticas sociales. 'Creo que entre las necesidades más urgentes de Córdoba están las infraestructuras, hacen falta mejores comunicaciones. La autovía hasta Málaga, el tramo Córdoba-Antequera, no puede tardar hasta 2010. Y el eje Córdoba-Badajoz también debe estar bien cubierto; es la columna vertebral de la provincia, la salida que nos comunica con el norte y el centro del país y con Portugal'.

'Hay otro recurso que no podemos dejar atrás: necesitamos más emprendedores, que en cada pueblo haya cada vez más proyectos empresariales cuyo objetivo sea la calidad', afirma. Pulido hace una lista larga y ordenada de las riquezas y potencialidades de la provincia, desde el olivo, el ganado y el vino hasta el patrimonio histórico-artístico, pasando por sectores emergentes como la madera. 'Tenemos muchas posibilidades de desarrollo y no podemos desperdiciar ninguna', concluye, pensando en Europa.