Jaca pierde la pista olímpica

Jaca suspendió por tercera vez el examen y perdió, de momento, la pista olímpica. El no hay dos sin tres le cayó encima a la candidata española a los Juegos de Invierno de 2010, que tampoco tuvo éxito para los de 1998 y 2002. La tecnocracia dirigida pareció decidirlo todo. Las tres ciudades de los países poderosos en la nieve y el hielo, Salzburgo (Austria), Vancouver (Canadá) y Berna (Suiza), junto a Pyeongchang (Corea del Sur), una de las dos asiáticas presentadas, como si se proyectara una representación de los tres continentes en liza, pasaron por este orden el corte de la comisión ejecutiva del COI en su sede de Lausana (Suiza). Así, cuatro, la mitad de las ocho en carrera, serán las que disputen la final en la 115ª Asamblea, el 3 de julio de 2003, en Praga.

La ciudad oscense recibió por fax, como todas las candidatas, el resultado. En la primera línea ya se indicaba que 'no había sido elegida'. Según las calificaciones hechas por una comisión de evaluación en 11 apartados, quedó la sexta, por detrás de la china Harbin -lastrada por Pekín 2008- y por delante de Andorra -otra vez descartados los Pirineos- y Sarajevo -sin recuperarse de la sangrienta guerra de los Balcanes-.

Salzburgo ganó en siete aspectos: alojamientos (Jaca, 7ª), infraestructuras y telecomunicaciones (6ª), instalaciones (5ª), ecología (4ª), transportes (6ª), experiencia (4ª) y finanzas (4ª). Vancouver venció en tres: villa olímpica (Jaca, 4ª), concepto general (5ª) y seguridad (2ª). Jaca también fue segunda en apoyo gubernamental y de la opinión pública, tras Harbin, en un triunfo inútil. Salzburgo, que eclipsa ya a Berna, y Vancouver son las dos grandes favoritas, pues Pyeongchang parece un brindis a Asia. Hasta se ha sabido que debería rellenar una montaña para trazar el descenso desde la altitud mínima.

Barcelona ganó los Juegos de Verano de 1992 en su quinto intento y tras 50 años de espera. A la mayoría de las ciudades organizadoras les ha costado esfuerzos similares. Conseguir unos Juegos es muy complicado y Madrid, que previsiblemente tomará el relevo de Sevilla para los de 2012 y frente a adversarios mucho más difíciles, entra en una carrera de fondo muy dura de ganar.

En esta línea de perseverancia imprescindible, la derrota de Jaca, una mala noticia en principio, ha sido rápidamente contestada por el presidente de la candidatura y consejero de Cultura del Gobierno de Aragón, Javier Callizo, en el sentido de que la localidad altoaragonesa presentará de nuevo su candidatura a los Juegos de 2014. Esta decisión, que tiene ya el apoyo del Ayuntamiennto y de la Diputación Provincial de Huesca, la propondrá el próximo día 3 al Consejo de Gobierno de la Comunidad. El propio presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, también se mostró partidario de seguir la aventura olímpica. 'Queremos que los Pirineos organicen unos Juegos', dijo en apoyo a la única gran cadena montañosa que sigue sin esa oportunidad y que, en toda lógica, acabará teniéndola.

Manuel Fonseca, director gerente de Jaca 2010 y precisamente uno de los protagonistas del éxito de Barcelona 92 como director de deportes, también tomó el resultado de ayer bajo estos parámetros: 'Se trata de un proyecto a largo plazo, que tira de todo y ha permitido mejorar ya muchas cosas. La próxima candidatura tendrá así cosas hechas en infraestructuras, que están aprobadas. Y en hoteles, como los de Panticosa y Canfranc, y la mejoría de los de Jaca'. Javier Gómez Angulo, el secretario de Estado para el Deporte, confirmó que esta derrota 'no limitará los planes del Gobierno central en las inversiones previstas'.

Lo peor de ayer fueron las reacciones de Granada, la candidata española derrotada por Jaca en la elección del Comité Olímpico Español (COE). Su alcalde, José Moratalla, dijo: 'Jaca ha pagado la equivocación del COE al elegirla'. Antonio Ortega, el consejero andaluz de Turismo y Deporte, abundó: 'Granada habría sido mejor candidata'. Por nombre, como es obvio, sí. Pero las valoraciones técnicas hechas entonces por la comisión de evaluación del COE olvidaron incluir deficiencias que difícilmente el COI habría pasado por alto. Entre otras, cabría recordar que los Mundiales de esquí de Sierra Nevada tuvieron que aplazarse un año por falta de nieve. En pleno cambio climático eso no lo olvidará jamás el COI.