'En España se cuelga el cartelito de modelo a cualquiera'

No sólo los cerebros españoles se ven obligados a emigrar. La modelo valenciana Rosa Deltoro ha paseado palmito por las pasarelas más internacionales: Christian Dior, Chanel, Emanuel Úngaro, Roberto Verino, Paco Rabanne, Gaultier, Dolce & Gabanna, Franco Moschino o Gianfranco Ferre, entre otros; sin embargo, su nombre es desconocido en su tierra. Su felina mirada turquesa, naturalidad y fotogenia son las principales bazas de esta modelo de 23 años.

Pregunta. Con 18 años su hermana envía sus fotografías a un concurso en Barcelona y cambia su vida.

Respuesta. Sí. Pensábamos que no iban a abrir la carta y me llamaron. El concurso me pilló en las semanas que preparaba selectividad, pero la aprobé y empecé Matemáticas, que tuve que dejar.

P. ¿Qué trabajos ha realizado recientemente?

R. Lo último ha sido la Semana de la Moda en Roma en la Plaza de España. En realidad, después he hecho dos desfiles: Alberta Ferretti y Moschino jeans.

P. A la escalinata de Roma acuden las más cotizadas top models.

R. Sí. Estaban Laetitia Casta, Valeria Mazza, Eva Herzigova o Naomi Campbell. Españolas éramos tres: Nuria de la Fuente, Nieves Alvárez y yo.

P. ¿Y qué se siente al desfilar en una pasarela tan glamorosa?

R. Te sientes muy orgullosa, porque en el casting éramos unas 500 modelos y seleccionaron a 20.

P. ¿Por qué su fama internacional no se refleja aquí?

R. Quizá porque para ser famosa en España tienes que tener padrinos que te den publicidad. Yo estoy contenta con mi trabajo, aunque mi nombre no se conozca.

P. ¿No tiene una espina clavada?

R. Me gustaría desfilar más en España. Cuando empiezas te dicen que todavía no puedes desfilar porque nos has trabajado fuera. Luego pese al éxito exterior no encuentras el reconocimiento nacional. En las pasarelas de Moschino o Ferretti de Milán no te cruzas a españolas. Cogen a las top models y que te elijan cuando que no eres muy famosa, es un honor.

P. Ha tenido problemas para desfilar en Cibeles y Gaudí.

R. En España funciona todo de manera diferente. En el exterior tienes la oportunidad de que el diseñador te vea. Aquí existe una organización, que intermedia y sólo si les gustas, enseñan tu composit a los diseñadores. Yo no pasé el filtro de la organización, aunque desfilé en las dos pasarelas porque Francis Montesinos, Josep Abril, Mireia Ruiz o Ángel Schlesser, por ejemplo, dijeron que querían trabajar conmigo.

P. ¿Cómo es el mundo de las agencias?

R. Las modelos tenemos una agencia madre, la mía es Traffic en Barcelona, que a su vez contacta con otras en Londres, Milán, París... Te adelantan el piso y el avión, si estás empezando, y se quedan un margen. Las que más se llevan son las francesas, que retienen hasta el 70%.

P. Después de las vacaciones en Chulilla, el pueblo de la familia, ¿qué le espera?

R. Un mes en Milán, seis en París, dos más en Milán, uno en Londres... No puedes hacer planes a largo plazo. Si paras, te conviertes en un limón sin jugo.

P. ¿Aparte de belleza, qué cualidades debe reunir una modelo?

R. Mucha voluntad y fuerza mental. La distancia es dura. Hay que sobreponerse cuando un día te sale mal y tienes la impresión de que no has gustado en ningún casting. Además debes saber captar la idea del diseñador y del fotógrafo. No ser un palo de escoba.

P. ¿Podría vivir en España de su profesión?

R. Supongo que podría mantenerme. Los desfiles de Valencia me salvan. Aprovecho todos para visitar a mi familia, que vive en Mislata.

P. ¿Tiene algún modista favorito?

R. Quizá, Franco Moschino. La relación es de amistad. Me citan una hora antes para comer con ellos, por ejemplo. No es la frialdad de modelos que rodean al diseñador que muestran.

P. No hace ejercicio y la paella de bacalao de la abuela de Chulilla le vuelve loca, ¿todas tienen tanta suerte?

R. Hay de todo. Te ves las típicas que comen alpiste. En mi familia somos todos muy flacos.

P. ¿Lo que más le ha sorprendido de su trabajo?

R. Uff... muchas cosas. Sobre todo que las cosas tarden tanto.

P. ¿En qué gasta más?

R. En alquileres de pisos y en teléfono.

P. ¿Hay famoseo en los desfiles internacionales?

R. No. Merecen mis respetos, pero no es modelo la estrella que acude a una pasarela un día. Ellas no hacen vida de modelo. En España se cuelga el cartelito de modelo a cualquiera. Fuera son más selectivos: o has viajado, o no eres modelo.

P. ¿En la moda hay muchos favores sexuales?

R. En el ámbito que yo me muevo no. He tenido suerte y cabeza. Nunca acudiría al primer casting que viera anunciado.