UGT considera que la marcha de 10.000 jornaleros a la vendimia francesa demuestra a Aznar que 'no son vagos'

Los jornaleros andaluces volverán a ser mayoría entre los temporeros españoles que empezarán a marchar al sur de Francia en los próximos días para participar en la vendimia. Según los datos expuestos ayer por UGT, unos 10.000 temporeros partirán de la comunidad, lo que supone más de las dos terceras partes del colectivo nacional que trabajará en la recogida de la uva. Los españoles constituyen también el grupo mayoritario entre los extranjeros que se desplazan al país vecino para esta campaña agrícola.

'Los andaluces somos los que más nos movemos, esto es una demostración de que es mentira que no queramos trabajar y seamos unos vagos', aseguró en conferencia de prensa Sebastián Marín, secretario regional de la federación agraria de UGT. El dirigente sindical hacía referencia a unas declaraciones del ex ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, que defendió la aplicación de la reforma del subsidio agrario que cobran los jornaleros, incluida en el decretazo, para 'evitar que Andalucía quede sumida en la indolencia'.

Marín recordó que los sindicatos retomarán las protestas a principios de septiembre, mes en el que está previsto que el Congreso de los Diputados dé el visto bueno a la reforma del Ejecutivo que preside José María Aznar, aunque descartó que entre esas formas de lucha UGT y CC OO incluyan el bloqueo de las próximas campañas agrarias, como el verdeo, medida que defiende el SOC.

Jaén, con 3.000 temporeros, será la provincia que más jornaleros aporte a la vendimia francesa. La secretaria de acción sindical de la federación agroalimentaria de UGT, Isabel Navarro aclaró que los salarios que percibirán dependen de la categoría profesional y del departamento francés en el que trabaje, aunque no pueden ser inferiores al salario mínimo interprofesional que, para el segundo semestre del año, está fijado en 6,83 euros por hora, una cantidad muy superior a la que es habitual en el campo andaluz. Navarro alertó de que este año se registra una reducción drástica en el número de contratados en origen: sólo 9.000 de los 15.000 previstos.