Arenas pregunta a Ibarretxe si 'ha optado por la ruptura del orden constitucional'
El Gobierno de José María Aznar ha emplazado al Ejecutivo de Juan José Ibarretxe a que aclare, como 'cuestión previa' a cualquier discusión en profundidad sobre las transferencias que Euskadi tiene pendientes, si 'ha optado o no por la ruptura del orden constitucional y del marco político que lo desarrolla'. Éste es el argumento central de la carta que el ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, ha remitido al lehendakari en respuesta a la misiva en la que, a finales de julio, el Ejecutivo vasco le emplazó a elaborar un 'calendario' que explicitara 'cómo y cuándo' La Moncloa haría 'efectivo' el traspaso de competencias al Gobierno de Vitoria. El Gobierno vasco ha acusado recibo y ha añadido que 'responderá oportunamente'.
Arenas considera 'trascendental' esta 'cuestión previa' que plantea a Ibarretxe. Consiste en definir 'si los partidos nacionalistas se sienten vinculados o no por el principio de lealtad constitucional al impulsar un emplazamiento inaceptable del Parlamento vasco' para que el traspaso de las 37 competencias que reclama Vitoria se negocie en 'dos meses'.
La resolución que aprobó el Parlamento vasco el 12 de julio exigía al Gobierno central 'que, con carácter urgente y en un plazo no superior a dos meses, defina un proyecto operativo y un calendario de cumplimiento y desarrollo completo del Estatuto de Gernika'. Y presumía que, de incumplirse ese plazo, que concluye el 12 de septiembre, 'asistirá a la sociedad vasca el derecho de entender que el Estado habrá quebrado definitivamente y de manera unilateral el consenso estatutario'. A partir de ahí, el Parlamento autonómico facultaba al Gobierno vasco a asumir esas competencias 'con independencia de los procesos transferenciales'. La resolución alude también a las 'potencialidades del Estatuto' que incorporaban a Navarra como territorio vasco.
Arenas reclama a Ibarretxe que aclare si esta argumentación pretende 'la ruptura del orden constitucional'. Si no es así, subraya que el 'diálogo constructivo no debería resultar difícil', y pone la renovación del Cupo vasco como ejemplo de la capacidad negociadora del Gobierno central.
Ilegalización de Batasuna
'En otro orden de cuestiones', Arenas dedica un párrafo al 'proceso de ilegalización de Batasuna'. Reitera que 'toda democracia tiene derecho a defenderse de quienes quieren acabar con ella' y hace una petición muy concreta al Ejecutivo de Ibarretxe: 'Tendría un valor extraordinario que el Gobierno vasco apoyara la aplicación de la Ley de Partidos Políticos'. Es decir, no pide el voto del Ejecutivo vasco o del PNV a la ilegalización, sino que 'apoye la aplicación de la ley'. Para el Gobierno, sería una 'buena noticia' que el Ejecutivo vasco promoviera una declaración a favor de la ilegalización de Batasuna. En todo caso, le advierte de que, aunque no le guste, sí deberá aplicar la nueva ley si finalmente Batasuna es declarada ilegal por el Tribunal Supremo.
