Buenos propósitos

Los mercados de valores se anotaron ayer una importante reacción técnica utilizando como argumento tanto la magnitud de la caída previa de las cotizaciones, como la posibilidad de que el deterioro de la economía de Estados Unidos pueda obligar a la Reserva Federal a rebajar los tipos de interés en su reunión de la próxima semana.

Los análisis han quedado desbordados por los recientes acontecimientos y en el mercado se acaricia la idea de la rebaja del precio del dinero como uno de los escasos factores, si no el único, que puede devolver a los inversores la confianza en el sistema.

La Bolsa española se sumó a la reacción y el Ibex 35 subió el 3,44%, la quinta subida en importancia en este ejercicio, que está resultando generoso con este tipo de datos. El principal indicador del mercado español cerró por encima de los 6.000 puntos, en 6.168,60, pero no por ello ha devuelto la confianza a los inversores. El índice general de la Bolsa de Madrid subió el 2,79%. Esta subida de los índices se apoyó, sobre todo, en los valores bancarios, con avances del 7,33% para SCH y del 6,44% para BBVA. Telefónica encontró más problemas para recuperar posiciones y cerró con una ganancia del 2,30%.

La contratación en el Mercado Continuo fue de 1.459,18 millones de euros, con una concentración de casi el 60% en SCH, Telefónica y BBVA.

La Bolsa de París ganó el 5,44%, Londres el 3,22% y Francfort un 6,67%. poco antes del cierre, mientras que Wall Street ganaba más del 4% a media sesión.

Como en ocasiones anteriores, la capacidad de esta reacción para consolidar los actuales niveles de las cotizaciones y poner freno a la caída de los mercados dependerá, sobre todo, de su continuidad. algo imprevisible en un año en el que la volatilidad de las bolsas ha crecido en los mismos términos que la desconfianza.