El Defensor del Menor en Madrid afirma que la ley 'antibotellón' es "muy dificil de aplicar"

El Defensor de Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro Núñez Morgades, afirmó hoy que la ley que regula el consumo de alcohol, que entró en vigor la semana pasada en las calles de la capital, donde durante la madrugada del domingo el Samur atendió unas 40 intoxicaciones por alcohol, "es muy difícil de aplicar".

"La ley es una realidad que habría sido deseable que hubiera tenido el consenso total, porque cada uno tenemos la posibilidad de actuar sobre sectores amplios, y entonces el consenso hubiera dado muchas más posibilidades de aplicación", matizó tras la celebración del Curso de Verano de la Universidad Complutense ""Quién educa a nuestro hijos"".

En esta misma línea, Morgades señaló que los efectos de la "ley seca" no se verán de forma inmediata, "sino que lo vamos a ver muy poco a poco", y pidió la implicación de toda la sociedad para que salga adelante. "La sociedad en general, los ayuntamientos, las comunidades autónoma, los profesores y los padres tienen que luchar contra un espectro, contra una situación muy difícil, ya que no hay conciencia de que el alcohol es una droga y lo es; es la droga que más afecta a nuestra juventud", denunció.

"No sé si esta ley se ha vendido bien, sobre todo sus diferentes aspectos, porque parece que es la 'ley antibotellón' y tiene muchas posibilidades, de atención a los drogodependientes, labor preventiva, informativa, ayudas a los ayuntamientos a encontrar vías de contención del fenómeno", prosiguió el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid.

A su vez, reconoció que "es verdad que en los jóvenes, todo lo que sea prohibición lo ven como invitación a hacer una actividad, pero se tienen que dar cuenta, mirando los datos de la agencias especializadas, de que hoy hay un consumo abusivo de alcohol por su parte. Deben ver en la ley una posibilidad de ayuda y no una posibilidad de sanción o represora", apostilló.

CAMPAÑAS PUBLICITARIAS

Morgades recordó que actualmente se dan situaciones que antes no se producían como "las enfermedades hepáticas y renales, la violencia, los accidentes de tráfico". "Las 12.000 personas que mueren al año en España por problemas de alcohol, los 154.000 enfermos que se incorporan como tales por problemas de alcohol, los 600.000 millones que se gastan a las enfermedades producidas por el alcohol, tienen que hacernos reflexionar y no hacernos caer en campañas publicitarias que eluden pronunciar y convencer de la realidad", añadió.

Tampoco hay que olvidar que "vivimos en una sociedad inmersa en la cultura del alcohol, y por tanto la ley tiene que luchar contra muchos inconvenientes, y principalmente necesita el apoyo de la juventud, que entienda que hay un problema".

"Es verdad que cada vez hay más jóvenes y menores abstemios, pero los que beben lo hacen mucho más", prosiguió un hombre para el que el fenómeno del botellón "ha propiciado una disponibilidad de alcohol que está llevando a un consumo compulsivo, a beber por beber, a beber por colocarse, y a beber cada día a una edad más temprana".

Toda la sociedad debe convencerse de "esta realidad muy preocupante, y principalmente lo jóvenes, de los que mucho creen que no les afecta. Este beber compulsivo hace que haya más bebedores de riesgo entre los jóvenes que entre los mayores", apuntó Núñez Morgades, convencido de que hay que apoyar la aplicación de la ley, "no sólo en la fase de sanción, sino en todas las demás, como son de información, prevención y búsqueda de alternativas".

El Defensor del Menor de la CAM también denunció el hecho de que "la juventud se está centrando mucho en la cultura de la noche", por lo que abogó por "llegar a hábitos saludables de ocio, volver a la cultura del día, de conectar con la naturaleza, compatibles con la de la noche, donde no debe centrarse todo".

En esta misma línea, reiteró la importancia de la labor preventiva en los menores de 13 años, edad en la que se empieza a beber, "para llevarles a la reflexión de que el alcohol es una droga, que se van a enfrentar a un mundo en el que la oferta de las distintas drogas va a ser continua, y prepararlos para que las rechacen".