'Es una propuesta inocua'

Javier Madrazo (Riaño, Cantabria, 1960), una figura extraña dentro de IU ya que viene del mundo cristiano, trata desde su puesto de consejero de Vivienda y Asuntos Sociales del Gobierno vasco de justificar su apoyo a la vía soberanista abierta por los nacionalistas del PNV y EA.

Pregunta. ¿Qué opina de las críticas a la ponencia de autogobierno que se discute en el Parlamento de Vitoria?

Respuesta. No se ha valorado que se habla del Estatuto. Hay que recordar que antes de las elecciones autonómicas los nacionalistas lo daban por superado. Ahora los medios presentan esta ponencia como la antesala de la independencia. Puede que algunos nacionalistas la tengan en la cabeza; nosotros no. Lo que queremos es ir a un Estado federal.

P. Pero la ponencia es muy clara: además de exigir las 37 competencias pendientes, habla de un nuevo marco jurídico. Esto es, pide el desarrollo completo del Estatuto y a la vez lo da por superado.

R. Eso no es nuevo. Ya hace unos meses, en un importante discurso del lehendakari, se estableció la necesidad de un nuevo marco de convivencia. Y en eso estamos de acuerdo, sólo que para nosotros ese marco debería ser el federalismo de libre adhesión.

P. ¿Cree que es momento de hablar de un nuevo marco?

R. Hombre, es que esa parte de la ponencia no es más que un elemento de reflexión política. No se plantea en ningún momento una ruptura, sólo queremos ampliar el consenso que el Estatuto tuvo en 1979.

P. ¿Con una iniciativa a la que se oponen PP y PSE?

R. La posición del PSE no la entiendo. Hace 20 años defendían la autodeterminación. Ahora se oponen a todo. Ésta es una resolución inocua.

P. ¿Cómo interpreta la abstención de Batasuna?

R. Los votos de Batasuna, PP y PSE han bloqueado el Parlamento vasco en decenas de ocasiones. Y nadie hablaba de pactos oscuros. Ahora Batasuna se abstiene y todos claman: estamos ante un Lizarra bis. El doble rasero es evidente. La abstención se explica porque están aislados y éste es un intento de volver a la escena.

P. ¿Está de acuerdo con los que, dentro de IU, insisten en que este tipo de propuestas sólo se pueden sacar adelante tras el fin de la violencia?

R. No podemos dar la llave de la política a ETA. La autodeterminación, el federalismo, no se pueden supeditar al fin de la violencia. Al menos no el debate político sobre estos asuntos.

P. ¿Cree que esto puede influir negativamente en los votantes de IU en todo el país?

R. Nuestro electorado es mucho más maduro que el resto. Y sabe discernir el grano de la paja. A pesar de la campaña que hay contra nosotros, la gente sabe cribar. A veces se discrepa, pero en los análisis de fondo coincidimos con toda la organización. No hay peligro.