Retevisión baraja eliminar 500 empleos tras unirse con Aunacable

La integración de los negocios del cable y la telefonía fija decidida por el Grupo Auna para aprovechar sinergias y reducir costes en su batalla contra Telefónica tendrá impacto sobre el empleo. La nueva Retevisión, aún por rebautizar y vaciada de la división audiovisual, que se desgaja, está revisando departamento por departamento las duplicidades que resultarán de la fusión con Aunacable antes de concretar un número de despidos. Las estimaciones internas realizadas hasta ahora por la empresa apuntan, no obstante, que deberá prescindir de unas 500 personas, según explicaron ayer fuentes de la compañía. El recorte se haría en el plazo de tres años y se intentará que sea lo menos traumático posible, añadieron. La cifra estimada representa un 17% del total de empleados de la nueva Retevisión.

Las plantillas de Aunacable y Retevisión suman 4.000 personas, pero a esta cantidad hay que restarle los 1.100 empleados que pasan a la división audiovisual, de modo que quedan 2.900.

Un portavoz de la empresa remarcó ayer que 'no se ha tomado aún ninguna decisión oficial sobre ningún recorte de la plantilla', y que la dirección ha transmitido al personal un mensaje de tranquilidad asegurando que, 'en caso de reducirse el empleo, el impacto recaería esencialmente sobre personal externo'. Las fuentes consultadas coincidieron en que el personal subcontratado, incluido en la cifra de 2.900 personas, será el más afectado, pero insistieron en que el staff también se verá afectado. Algunas duplicidades (como en call centers y en departamentos de sistemas) son claras.

La nueva Retevisión, al frente de la cual estará Antonio Hernández, arranca con 372 millones de euros, 3,2 millones de clientes y una inversión acumulada de 3.700 millones de euros.