Armónico y aerodinámico

Dicen que es bonito esto de la crono por equipos. Dicen que es armónico y armonioso, que debe ser lo mismo. Dicen que es ante todo un ejercicio de estética, todos igualitos, bien conjuntados y bien avenidos. Dicen que lo que más llama la atención es toda la parafernalia: los cascos aerodinámicos con perfil de gota para que fluya el aire, con su propia lente incluida; las cabras, que por un día salen en rebaño, acostumbradas normalmente a ir cada una a su aire; las ruedas lenticulares y de aspas, verdaderas reservas de inercia que sólo ayudan al que ya de por sí va acompañado de fuerza, es decir, a unos pocos; los buzos aerodinámicos (no es por ser pesado, pero es que aquí, hasta los peinados son aerodinámicos; que no sé si se han fijado, pero, ¿no les parece una palabra muy relajante?; serán cosas mías, que me lo he tomado hoy con calma.) Sigo: los manillares de cuernos, que nos obligan a mantener esa postura tan aerod... -ejem, perdonen-, los botines protectores, los apósitos nasales, el mentol con el algodón en la nariz en los momentos previos, el botellín de agua con bicarbonato (no se lo aconsejo), y yo no sé cuántas cosas más que no recuerdo, porque las doy por ya sabidas.

Es en síntesis lo mismo que una crono individual, pero multiplicado por nueve y coincidiendo en el espacio y tiempo (si es que eso existe, pero estas discusiones las dejaremos para otro día que estemos más cansados). ¡Qué bella estampa!, dicen los italianos.

Y luego, claro, no hay que olvidar la estética del esfuerzo. El todos para uno y uno para todos más fácil de ver sobre una bicicleta. Que no el único, pero si el más evidente. Sí, es verdad, dicen que de verdad es bonito, y algo de razón tienen.

Pero más razón tienen los que dicen que es duro, y si tus compañeros van mejor que tú, no es duro, es mortal.