Javier Sádaba reflexiona sobre periodismo de salud en El Escorial
El filósofo Javier Sádaba, participó hoy en el encuentro "Avances en comunicación biomédica: habilidades y herramientas", donde opinó que el periodista especializado en temas de salud "no tiene que ser un experto, pero sí conocer el medio donde se mueve y los problemas que lo acompañan". La ponencia de Sádaba "Etica y derecho en el periodismo de la salud", se enmarcó dentro de los cursos de verano de la Universidad Complutense en San Lorenzo de El Escorial, "La salud", dijo, "es uno de los bienes básicos más preciados", y actualmente la nueva medicina "exige del periodista" una actualizada formación para realizar con éxito su tarea, ya que ésta "supone un elevado grado de conocimiento y una determinada ética". Para Sádaba, la ética del periodismo es una ética "como las demás", pero que también tiene sus propias características por su profesión y "es sobre todo una ética del bien, del buen vivir y de la felicidad". Así mismo, reflexionó sobre la "nueva dimensión" en la que ha entrado el periodismo de la salud. En este sentido destacó el concepto de "infoética" que desarrolla los problemas éticos que plantean las nuevas tecnologías, con temas como el acceso universal a la información, la fiabilidad de lo que se informa y sus riesgos respecto a la dignidad humana. Además, incidió el "enorme abismo" existente entre los avances de la investigación científica y los conocimientos que la gente tiene de ella. Sádaba destacó tres características que debería cumplir el periodista de la salud: la calidad de la información, la veracidad de las noticias y la conveniencia de que haya una comunicación con sus lectores y oyentes, aunque reconoció que hay restricciones como las directrices que marcan los medios y las exigencias de los anunciantes y de la industria de la salud "que le encorsetan". Además hizo referencia a la "avalancha de curanderos, métodos de auto-ayuda, falso orientalismo, magos o adivinos" que ha llegado al mundo de la salud, y que para él "son una plaga que nos está invadiendo". Finalmente, recordó que el noventa por ciento de los bienes médicos están al servicio del diez por ciento de la población, lo que es "una situación miserable aunque se diga que es un bien básico que hay que proteger".
