Los obispos vascos creen que ilegalizar Batasuna provocará más confrontación

La carta pastoral, de ocho folios, que condena claramente el terrorismo, reserva un capítulo a la Ley de Partidos Políticos. Los obispos advierten de los peligros de ilegalizar Batasuna: 'Tampoco podemos prever todos los efectos de signo contrapuesto que podrían derivarse de la aprobación y eventual aplicación [de la Ley de Partidos]. Pero nos preocupan como pastores algunas consecuencias sombrías que prevemos como sólidamente probables y que, sean cuales fueren las relaciones existentes entre Batasuna y ETA, deberían ser evitadas'.

Los obispos afirman en otra parte del documento que 'la paz es incompatible con el terrorismo', a la vez que recalcan que 'no todo vale contra el terrorismo'. Los obispos reclaman diálogo sin exclusiones y proponen el acercamiento de presos etarras a Euskadi con el argumento de que 'entrañaría un gesto de humanidad, sobre todo para sus padres y familiares'.

El PP y el PSOE expresaron su 'estupor' ante la pastoral. Carlos Iturgaiz, presidente del PP vasco, declaró: 'Los obispos vascos están más cerca de los verdugos que de las víctimas. La pastoral es un disparate y demuestra que la iglesia, en Euskadi, no es universal y que los obispos vascos son la voz de su amo, que no es Dios sino Arzalluz'.