Un comité especial supervisará la gestión de Messier en Vivendi

Un comité de administradores de Vivendi Universal se ocupará de supervisar el gobierno del grupo y 'proponer nuevas medidas', inspirándose en 'las mejores prácticas internacionales en ese terreno', según la decisión tomada por su consejo de administración en una reunión de nueve horas celebrada el miércoles pasado en Nueva York. Los especialistas franceses del sector lo interpretan como una medida destinada a controlar más de cerca al presidente del grupo de comunicación, Jean-Marie Messier, que continúa en el cargo.

La instalación del nuevo comité supone la vuelta al primer plano del canadiense Edgar Bronfman Jr., heredero de la familia fundadora de Seagram (la empresa dueña de los estudios Universal), que orquestó hace dos años la fusión de su empresa con Vivendi y el grupo Canal Plus.

La familia Bronfman, que con el 5,3% del capital es uno de los mayores accionistas de Vivendi Universal, se muestra muy inquieta por la caída de la cotización del título. Esto explica las razones que llevan a Edgar Bronfman Jr. a implicarse de nuevo tras haber renunciado a toda función ejecutiva, aunque se mantenía como vicepresidente. Él mismo copresidirá el comité de supervisión junto al banquero francés Marc Viénot, ex presidente de la Société Générale, quien ha criticado algunos aspectos de la gestión de Messier.

Todo parece indicar que el resultado de la reunión de Nueva York es el fruto de un compromiso. A través de un comunicado, Messier se limita a expresar que 'espera' las propuestas del comité mencionado. Los analistas quieren conocer cómo piensa actuar el grupo para reducir su fuerte endeudamiento, del orden de 17.500 millones de euros en Vivendi Universal y otros 15.000 millones atribuidos a su filial de servicios, Vivendi Environnement. El título de Vivendi perdió ayer 4,68% en la Bolsa de París y cerró a 32,16 euros.

Planes de futuro

El grupo no ha indicado los activos que podría vender, entre los cuales la prensa francesa especula con un porcentaje de entre el 15% y el 20% de Vivendi Environnement. Otra negociación afecta a la cadena televisiva italiana Telepiù, cuya fusión con Stream, controlada por el magnate Rupert Murdoch y por Telecom Italia, se rompió hace dos semanas a causa de los excesivos condicionamientos impuestos por la autoridad audiovisual italiana. No se excluye que Murdoch termine comprando Telepiù.

A su vez, el presidente del Consejo Superior Audiovisual (CSA), Dominique Baudis, ha dado a entender que el Estado francés estudia una revisión de las condiciones en que Canal Plus Francia ejerce la licencia de emisión que tiene concedida. En una entrevista por televisión, Baudis insistió en su inquietud respecto a las posibilidades de Canal Plus Francia -actualmente, una filial de Vivendi- para seguir siendo el principal sostén financiero del cine francés. Y añadió: 'La ley indica que cuando una televisión o una radio recibe la autorización del CSA para emitir por cinco años, esta autorización puede ser suspendida si se produce una modificación sustancial del capital o de los órganos de dirección'.

El diario Le Monde interpreta tal declaración como una alusión a decisiones que podrían estudiarse, una vez que el Consejo de Estado opine sobre si el accionariado actual de Canal Plus Francia cumple o no con las condiciones previstas en la legislación francesa. Se sabe que el citado órgano consultivo del Estado hará público un informe sobre el capital de Canal Plus Francia entre el 13 y el 20 de junio.