Rojo cree un 'error histórico' que el PNV rechace la Ley de Partidos
El secretario general del PSE de Álava, Javier Rojo, criticó ayer con dureza al PNV por rechazar el proyecto de Ley de Partidos, que prevé la ilegalización de las formaciones que defiendan el terrorismo. Rojo, quien ayer hizo balance del primer año transcurrido desde las elecciones autonómicas, calificó de 'error histórico' la postura peneuvista.
Según Rojo, el objetivo de los nacionalistas con su oposición al proyecto de ley sería garantizarse una especie de escudo protector contra ETA. 'El PNV ha preferido que otros hagan el trabajo, que solucionen la papeleta, y así cree que los insultos de los violentos, por no decir otras cosas, irán contra los que defendemos el Estado de Derecho'.
En este tono de indignación, el político socialista enfatizó que no existe ningún precedente democrático en el mundo en el que un partido con responsabilidades de gobierno, como el PNV, se mantenga al margen de una responsabilidad política tan importante como es la de actuar contra los que defienden y amparan el terrorismo. 'La ley de partidos se hace porque no hay libertad ni democracia en el País Vasco', resaltó.
Para Rojo, el año transcurrido tras las elecciones de mayo de 2001 se caracteriza por el 'fracaso' de la política y de las iniciativas del lehendakari Juan José Ibarretxe. Tan sólo libró del desastre la declaración de Eudel de respaldo a los concejales amenazados y la Mesa de Arkaute, el foro constituido para proteger a los ediles.
Las reacciones al proyecto de ley de partidos se sucedieron ayer. El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, acusó al presidente del Gobierno central, José María Aznar, de buscar la ilegalización de Batasuna únicamente por 'obcecación electoral'. Mientras, la parlamentaria de Batasuna Jone Goirizelaia pidió a PNV y EA que se movilicen contra la ley.
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