Barcelona pugna por atraer la actividad de Boeing en Europa

Barcelona compite con Madrid para atraer la actividad que el gigante aeronáutico Boeing quiere potenciar en Europa, en su estrategia actual de diversificación y mundialización para hacer frente a la crisis y para zafarse de la etiqueta sólo americana. Tres ejecutivos de Boeing han expresado esta semana en Barcelona su 'claro interés' por la ciudad como 'posible ubicación' europea para su negocio de desarrollo de software y tecnología interior de los aviones.

La tarea exploratoria de Boeing fue desvelada ayer por Fernando de Caralt y Juan Lecue, presidente y director gerente, respectivamente, de la asociación Barcelona Aeronáutica y del Espacio (Baie), creada en noviembre de 2000 para potenciar la industria aeronáutica en Cataluña.

Robert Watt, Scott Griffin y Vaho Rebassoo, tres directivos de Boeing, han pasado esta semana por Barcelona, en el marco de una visita organizada por la Cámara de Comercio de Seattle (EE UU), que se produce después de que el consejero de Industria, Antoni Subirà, visitara aquel Estado. La delegación se ha puesto en contacto con distintas autoridades, entre ellas el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y el alcalde de Barcelona, Joan Clos. En este marco, el pasado miércoles se celebró una mesa de trabajo en la que participaron algunas de las 63 empresas adheridas a Baie, que batalla para elevar el pobre 3% que pesa Cataluña en el negocio aeroespacial español, con iniciativas como promover aeródromos y presionar para que las empresas catalanas no queden fuera de proyectos como Galileo, o atraer inversiones.

Durante la reunión, los directivos de Boeing explicaron que están explorando dónde ubicar actividades de software, desarrollo de sistemas, aviónica, I + D y desarrollo de nuevos productos, valoraron que España es un buen 'punto de arranque' y mostraron su 'claro interés por conocer las capacidades y ventajas de Barcelona'.

Boeing acaba de crear en Madrid un centro de I + D especializado en medio ambiente y gestión del tráfico aéreo, pero los únicos centros que escogió para colaborar en sus proyectos fueron la Universidad de Sheffield y la Politècnica de Cataluña (UPC), dato que, para Vladímir de Semir, concejal de Ciudad del Conocimiento, 'da alas a las posibilidades de Barcelona'.