El intruso
Estudio de Alexei Trotzky. 1908.
Pocos compositores han trabajado de forma tan magistral el tema de la interferencia como Alexei Troitzky. Vea el lector este hermoso ejemplo, que contiene además una notable variación 'en eco'. Las negras tienen una torre de ventaja, y en apariencia detener los peones blancos es sencillo, pero se sabe que la apariencia es, en ajedrez, la madre de todos los engaños. La primera jugada de la solución es 1 Cf7 j.!, que pone en acción un caballo que tendrá un formidable destino. Las negras disponen de dos retiradas, a saber, a h7 a g6. Veamos primero 1... Rh7, a la cual las blancas responden con 2 e7. Ahora la torre no tiene acceso a e5 o a d8, pero ello parece solucionarse sencillamente por medio de 2... Td1 j. / 3 Rh2, Te1, y todo parece liquidado; pero en realidad las negras han ingresado en un callejón sin salida: 3 c7 amenaza coronar, y después de la forzada 3... Af5 las blancas responden con la notable maniobra 4 Cg5 j., Rg6 / 5 Ce6!!, una brillante jugada de interferencia. Las líneas defensivas de las piezas negras son ocupadas por este inoportuno intruso, que las confunde y anula. Si 5... A - e6 / 6 e8=D ganando fácilmente, y si 5... T - e6 / 6 c8=D, T - e7 / 7 D - c4 y el prefinal está ganado por las blancas. Queda por ver qué sucede si en vez de 1... Rh7 las negras juegan 1... Rg6, que impide la línea anterior. En ese caso las blancas ganan con 2 c7, Tc5 / 3 Ce5 j., Rf5 / 4 e7, Aa4 y ahora el intruso vuelve a confundir las cartas: 5 Cc6!!, una bella variante 'en eco' que gana aún más sencillamente que en la variante anterior.
