Tentado por la frivolidad

'A nadie se le escapa que este es un partido puñetero', dijo Del Bosque en referencia al último partido de Liga del Madrid, ante el Deportivo, esta noche (21.30, Teletaquilla) en Riazor. El momento es engorroso por tres razones. Porque el Madrid ha perdido la Liga, porque debe luchar por un ingrato segundo puesto en el peor escenario posible y porque sólo faltan cuatro días para el duelo 'histórico', en palabras de Jorge Valdano, la final de la Liga de Campeones contra el Bayer. Un partido que resolverá si la temporada del centenario blanco fue una simple frustración, o como asegura Valdano, 'la mejor de la década'.

El director general deportivo del Madrid no admite despistes: 'Sabemos que el miércoles tenemos una cita con la historia. Pero eso no significa que vayamos a ser frívolos en A Coruña. Iremos a hacer un partido muy serio'.

Del Bosque aseguró que deja en Madrid a Raúl, Makelele y Campo por baja médica -Helguera no jugará por sanción-. A excepción de Figo, el técnico dice que no quiere ahorrar fuerzas para luchar por el segundo puesto. Figo permanecerá en Madrid descansando y rehabilitando su tobillo para la final. 'Por lo demás, hemos configurado una lista con los jugadores que están en las debidas condiciones físicas', explicó Del Bosque.

Lo cierto es que muchos de los que viajaron a A Coruña están maltrechos o distraídos después de una temporada que consideran larga y accidentada. Raúl, con una parameniscitis en un menisco, y Makelele, con una sobrecarga muscular, han jugado varios partidos medio lesionados. Ahora se reservan para Glasgow. La final es una obsesión para una plantilla extrañamente agobiada, a la espera del choque de Hampden Park.

Si el Madrid piensa en Glasgow, el Deportivo afronta el choque con la ilusión del que sólo le falta un último detalle para coronar con éxito su año laboral antes irse de vacaciones. El triunfo en el campo del Betis la jornada anterior (3-0) aseguró al Depor un puesto en la Liga de Campeones y ahora sólo tiene que derrotar a un Madrid presuntamente desmotivado para asegurar la segunda plaza, evitarse el engorro de la fase previa en la próxima Copa de Europa y dar carpetazo a una temporada que todo el mundo en A Coruña -el club, los jugadores y la afición -coincide en calificar de notable. Para mostrarse obsequioso con su rival de hoy, el entrenador deportivista, Javier Irureta, le envió ánimos ante la cita de Glasgow. 'Yo quiero que el Madrid gane la Liga de Campeones. No soy como Gaspart', aseguró el técnico.

Riazor estará repleto como en las grandes ocasiones gracias a una astuta jugada del presidente del club, Augusto César Lendoiro: hace dos meses, cuando aún no se sabía si este partido podría ser decisivo para el título, puso las entradas a la venta y las agotó rápidamente. El público no podrá celebrar el previsible pichichi de Diego Tristán, ausente por problemas musculares. Por motivos similares, también es probable que Víctor se quede fuera del equipo, aunque Irureta le ha convocado.

Alineaciones:

Deportivo: Molina; Héctor, César, Naybet, Romero; Sergio, Mauro Silva; Scaloni, Valerón, Fran; y Makaay.

Real Madrid: César; Michel Salgado, Hierro, Pavón, Roberto Carlos; McManaman, Flavio, Zidane, Solari; Guti y Morientes.