Lo razonable
Quiero vivir tranquilo, sin crispación, pero no cesan de llamarme insolidario.
Un día tuve que emigrar de mi tierra (Castilla-La Mancha) porque desde el franquismo se ignoraron y abandonaron muchas zonas rurales y del interior. Ahora que vivo en Zaragoza, y como la inmensa mayoría de quienes vivimos en la cuenca del Ebro queremos que el agua de este río sea aprovechada en esta cuenca, me llama insolidario el mismísimo presidente del Gobierno.
¿Es razonable que aquí no se hayan hecho la mayor parte de las obras entendidas como necesarias hace más de un siglo por falta de dinero y ahora se quieran invertir billones para llevársela?
¿Es razonable que desde el Gobierno se encargue un estudio sobre el trasvase del Ebro a numerosos expertos, y a pesar de que éstos lo desaconsejen no se les haga caso?
¿Es razonable que se pida solidaridad a comunidades menos desarrolladas para otras más desarrolladas?
¿Es razonable que hayan autorizado en Murcia 34 campos de golf en el último año?
¿Es razonable y responsable no buscar el consenso con la oposición para este inmenso plan?
¿Es razonable y responsable buscar un apoyo, que no hace falta, de dos presidentes autonómicos (Castilla-La Mancha y Extremadura) sólo para tener bazas contra la oposición?
¿Es razonable que a esos dos presidentes autonómicos, que les han apoyado por las prebendas ofrecidas, no les llame insolidarios y lo tengamos que escuchar tantos otros?
Si este trasvase se consumara, mis hijas, y si no mis nietos, tendrán que coger algún día sus cosas y, como yo, emigrar, esta vez, al Levante español; porque la riqueza de aquí se la quieren llevar, e, ironías de la vida, puede que su trabajo fuera llevar los bártulos de tanto golfista que, según parece, tienen previsto que prolifere. ¿Sería esto razonable?
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.