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Reportaje:GENTE | La jornada de Liga | FÚTBOL

El examen más importante del interino Olabe

El técnico de la Real Sociedad, que ya sabe que se le busca sustituto para el próximo curso, se juega la permanencia de su equipo ante un Madrid lastrado por las bajas, pero al que sólo le vale la victoria

El Madrid, dos citas más y Roberto Olabe dará por cerrado el paréntesis más importante, y breve, de su carrera como entrenador. La directiva de la Real Sociedad sólo cuenta con él para que su sustituto, aún por designar, no coja al equipo en la Segunda División. Curiosa forma de agradecerle los servicios prestados.

Sin embargo, Olabe siempre ha tenido claro que su puesto caducaba en junio. Lo aseguró nada más vestirse de corto para entrenar a la primera plantilla blanquiazul hace cinco jornadas. Lo que no imaginaba es que, con la permanencia entre interrogaciones, se filtrasen ya los apellidos de los candidatos a sucederle. Y menos, ante la visita, hoy (21.30, La 2 y televisiones autonómicas), del Madrid, su examen más importante. Su primera cima si logra que su equipo controle el pánico y se quede con los tres puntos.

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El Madrid, renqueante por sus numerosas bajas -Hierro, Pavón y Guti, sancionados, y Morientes, lesionado-, no puede perder. Le va la Liga en ello. Pero a la Real, que un día después del 21º aniversario de su primer título liguero no sabe si jugará en Primera el próximo curso, también. Olabe sostiene que la Real 'es capaz de ganar a cualquiera, aunque sea muy complicado jugarle al Madrid'. El golpe de efecto de Vicente del Bosque en el Camp Nou, lo que el propio técnico blanco bautizó como 'un paréntesis', ha acentuado la fragilidad anímica de la Real, que ya no sabe a qué sistema encomendarse.

Curiosamente, el estado moral de los donostiarras mejora si se contempla desde Madrid; 'Sabemos que vamos a tener un rival muy motivado, con una agresividad especial, como han declarado los propios jugadores de la Real. Si eso mismo lo hubieran hecho desde el principio del campeonato, quizá no se encontrarían ahora en la situación en la que están', observó ayer Del Bosque. La apreciación vale en este caso: la ciclotimia de la Real parece irremediable a estas alturas. De hecho, la tensión del juego del equipo guipuzcoano se ha desinflado en las últimas citas (el Valencia le goleó por 4-0 y el Betis por 3-0), incapaz de sobreponerse al primer contratiempo. Pero Del Bosque y Helguera, quien ayer se quejó también de la agresividad hacia ellos de los rivales, pueden estar tranquilos: la Real acostumbra más a desfogarse corriendo y presionando que repartiendo patadas.

Al margen de la actitud de su cuadro, Olabe tiene el complicado reto de apuntalar su defensa. Parece tener claro que Luiz Alberto es inservible, pero su recambio, Kvarme, no garantiza serenidad. En las últimas citas las peores noticias le han llegado desde la zaga, culpable de enormes errores que han contagiado a todas las líneas. La solvencia de la Real queda a expensas del contrincante: sólo funciona si éste falla o tiene un día espeso.

Por eso Olabe teme al camaleónico Madrid: 'No sabemos si se parecerá o no al del Camp Nou. Tenemos que tratar de aprovechar todas las circunstancias favorables, como su presunto cansancio, sus lesiones y sus compromisos en la Liga de Campeones'.

El Madrid es su propia referencia, aunque viaje sin una de ellas, Hierro; vea roto el eje central de su cobertura por la ausencia también de Pavón, y mantenga entre algodones a Solari, el jugador que ha refrescado últimamente al equipo y la gran duda de Del Bosque. Las bajas devolverán a Karanka al centro de la defensa junto a Helguera.

Real Sociedad: Westerveld; Rekarte, Kvarme, Jauregi, Aranzabal; Xabi Alonso, Idiakez; Tayfun, De Pedro, Koklov; y Kovacevic.

Real Madrid: César; Salgado, Helguera, Karanka, Roberto Carlos; Makelele, Flavio; Figo, Raúl, Zidane y Munitis.

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