Cinco autobuses, atacados por los piquetes en una nueva jornada de paro

Los piquetes de la huelga del transporte se cebaron ayer de nuevo con los autocares de las líneas discrecionales. El conflicto, que ayer vivió su décima jornada de paro, se encuentra pendiente del fallo del arbitraje, previsto para mañana. Cinco autobuses fueron atacados durante la mañana de ayer y sufrieron la rotura de varias lunas, según explicaron fuentes de la Policía Nacional. Cuatro de ellos eran propiedad de la empresa Samar, que desde que comenzaron los paros ha sufrido más de 90 ataques similares. Dos de ellos resultaron asaltados cuando se dirigían a la Estación Sur, y los otros dos, al regresar a las cocheras. Nadie resultó herido en los ataques porque cuando se produjeron los vehículos no llevaban ocupantes.

El quinto autobús afectado, propiedad de la empresa AISA, fue cebo de los piquetes cuando circulaba hacia Getafe. Tampoco hubo heridos.

Fuentes empresariales confirmaron ayer a Efe que esta semana un conductor que acababa de llevar viajeros al aeropuerto de Barajas resultó atacado por un grupo de piquetes cuando abandonaba el recinto y necesitó recibir asistencia médica por las lesiones que le causaron.

El Ministerio de Fomento anunció ayer que ha abierto expedientes a las empresas Auto Res, AISA y Llorente por incumplir durante la huelga los servicios mínimos entre la capital y Agudo, Badajoz, Valencia, Salamanca, Vigo y Valverde del Camino.

Asimismo, Fomento ha expedientado a la empresa Continental Auto por incumplir todos los servicios mínimos de las líneas que le corresponde cubrir, salvo en el caso de la que une Madrid con Logroño y Soria.

Fomento, a quien compete el control de estas líneas por ser de largo recorrido, reconoce en un comunicado, sin embargo, que la mayoría de las empresas que efectúan estos servicios han cumplido, 'incluso con creces', los servicios mínimos del 40% que se les había impuesto. El ministerio recuerda que los controles seguirán realizándose 'día a día', por lo que 'se continuarán abriendo nuevos expedientes a aquellas empresas que puntualmente no realicen los servicios mínimos establecidos'.

El titular del ministerio, Francisco Álvarez Cascos, alabó ayer la 'autoridad moral y laboral' de Jaime Montalvo, el árbitro nombrado por el Ejecutivo regional para solucionar el conflicto del sector del transporte, y recordó que 'hay que ayudar en la elaboración y el acuerdo del laudo para que todas las partes se sientan implicadas y dar por zanjado el conflicto'. 'No debe cuestionarse lo que pudo ser y no fue el acuerdo, no tiene sentido', añadió. 'Su decisión debe ser aceptada por todos, y muy pronto'.

'Estrepitoso fracaso'

Por su parte, el secretario general de la Federación Socialista Madrileña (FSM), Rafael Simancas, calificó ayer de ' estrepitoso fracaso' los servicios mínimos impuestos por el Gobierno regional. 'El Gobierno debería haberse implicado más en el problema de fondo de este conflicto, ya que durante un mes ha estado dormido, y haber hecho cumplir los servicios mínimos, previamente pactados, con la presencia del orden público si era necesario', aseguró.

El líder socialista pidió al Ejecutivo regional una postura flexible sobre los expedientes abiertos a los trabajadores del transporte, cuya retirada exigían los trabajadores para desconvocar la huelga, y que el plazo del laudo se amplíe en 24 horas si mañana, fecha límite impuesta por el Gobierno regional, no se logra un acuerdo que ponga fin al conflicto.

Durante el día de ayer, la de Boadilla del Monte fue la única de las 17 líneas que han prestado servicio a los municipios aislados por la huelga que no salió. Esto se debió, según fuentes de la patronal, a que los conductores no acudieron a sus puestos por la presión que los piquetes han ejercido sobre la empresa Boadilla, a la que pertenecen.