Nacha Guevara se plantea su nuevo espectáculo, '60 años no es nada', como un ejercicio de libertad expresiva
La cantante, actriz y bailarina Nacha Guevara ha elegido Madrid para el estreno mundial, el próximo viernes 15, en el teatro Calderón, de su último espectáculo, 60 años no es nada, un musical que define como un 'ejercicio de libertad expresiva, canto a la vida, a la energía, con el que la gente saldrá rejuvenecida y dispuesta a borrar la creencia de que a los sesenta no se puede estar en la brecha y llegar con plenas facultades creativas', dijo ayer la actriz, que está a punto de cumplir 62 años. Guevara declaró que con este espectáculo, 'el más hermoso' que ha 'hecho nunca', quiere saldar en parte una gran deuda que tiene con España, país al que ha venido con asiduidad desde que en la década de los setenta trajo su espectáculo Nacha de noche.
Musical
El nuevo montaje está claramente enmarcado dentro del género del musical y, por tanto, alejado de los espectáculos de cámara a los que Nacha Guevara tiene acostumbrado al público español. Entre las 18 canciones que interpreta, con letras de Mario Benedetti, Boris Vian, Charles Aznavour o Jean Paul Sartre, hay cuatro de sus temas más populares. El resto son nuevas creaciones de Guevara, que también firma la idea, el texto y la dirección de 60 años no es nada, montaje coproducido entre Iberarte, Heraldo y Pentación y en el que también intervienen el escenógrafo Alberto Negrín y el coreógrafo Gustavo Wons, que baila junto a Gonzalo Larrazabal. Nacha Guevara afirmó que es el teatro -'que siempre enseña que todo es efímero y que es un gran entrenamiento para la muerte, ya que contiene la tragedia y la gloria de desaparecer'- el que marca sus trabajos.
'Todo está en la línea de lo que el público está acostumbrado a ver en mí, pasando de lo cómico a lo sublime, de lo poético a lo ridículo o a lo satírico', señaló Guevara, que el pasado año publicó un libro de memorias con igual título que el espectáculo.
