Dos centenares de onubenses piden la construcción de un parque en los terrenos del viejo estadio
La plataforma opuesta al plan municipal de viviendas presenta un manifiesto de desarrollo
Unas 200 personas -300, según los organizadores- acudieron durante la tarde de ayer a una concentración convocada por la Plataforma Pro Isla Chica, a fin de presentar públicamente un manifiesto para el desarrollo económico de esta barriada, la más masificada de Huelva. La movilización supuso también una muestra de rechazo al proyecto del alcalde onubense, Pedro Rodríguez (PP), de construir 470 viviendas en el suelo del viejo estadio Colombino. El caso Isla Chica se encuentra actualmente en manos del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
El presidente de la plataforma, Cristóbal Forján Ruzo, se mostró satisfecho con la participación de vecinos: 'Alguien había dicho que no iban a venir más de 40 personas. Creo que la asistencia está muy bien. Hoy en día no hay quien mueva a la gente en Huelva de sus casas por cualquier cosa', dijo.
Los dirigentes de la plataforma cumplieron ayer con una de las promesas que han venido formulando desde hace un año, a fin de evitar que el estadio Colombino se convierta en un gran bloque de viviendas. Una era la de realizar una convocatoria pública de repulsa contra ese proyecto. La llevaron a cabo ayer. La otra, la de denunciar las presuntas irregularidades cometidas en la venta del viejo estadio Colombino a la inmobiliaria Odeinsa por 2.700 millones de pesetas, ha hecho que Pedro Rodríguez esté imputado ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) por cuatro presuntos delitos urbanísticos.
De todos modos, Cristóbal Forján echó en falta ayer a los dirigentes de varias asociaciones de vecinos de Huelva. Y, sobre todo, a la ejecutiva de la Federación de Asociaciones de Vecinos Tartessos. 'Yo nunca diré que están comprados por el alcalde. Pero deben tener algún tipo de compromiso con alguien. Deberían explicar el motivo por el cual no han venido aquí, porque en más de una ocasión se han ofrecido para hacer de intermediarios en la polémica', afirmó.
Por su parte, Manuel Muñoz Barrios, uno de los firmantes de la querella criminal interpuesta hace un año contra Pedro Rodríguez y cuatro concejales del gobierno municipal del PP, se mostraba 'muy contento' con la respuesta del pueblo de Huelva a esta llamada: 'Los vecinos no se han asustado y han acudido para defender sus derechos', dijo.
La concentración se prolongó durante 90 minutos. Manuel Muñoz Barrios leyó un comunicado, titulado Manifiesto por el Futuro de Isla Chica, en el que se apuesta porque el estadio Colombino se convierta en el futuro en 'un gran parque dotacional para Huelva'. Pero los vecinos también reivindican la construcción en ese suelo de un Centro de Salud, un centro cultural, un centro social y de ocio, y una galería comercial de servicios y restauración.
Además, el manifiesto indica: 'No admitimos, por ilegal y falta de sensibilidad, la construcción de un solo piso en los terrenos que ocupa el estadio'. Y añade: 'Censuramos las actitudes de intransigencia, falta de diálogo e insensibilidad puestas de manifiesto por el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Huelva, que impide el desarrollo sostenible que la más populosa barriada de Huelva necesita'.
Entre los asistentes estuvieron todos los portavoces de los grupos de la oposición municipal. José Juan Díaz Trillo, portavoz socialista, indicó: 'Se ha abierto una nueva etapa. A partir de hoy podrá empezar a hablarse del futuro de Isla Chica, una vez que todos estamos ya convencidos de que será imposible construir en esa zona. Queremos una Isla Chica que sea un segundo centro de la ciudad'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.