Cultura o negocio

Pero, ¿existe cultura en Alicante? Con esta pregunta el historiador Emilio Soler abrió ayer el debate Situación actual de la cultura en Alicante que organizó el escritor Gerardo Muñoz. Soler considera que Alicante y la cultura están reñidas y son términos antitéticos. 'Hay negocio cultural', matiza la edil socialista, Carmen Sánchez Brufal. 'Es evidente que no hay una cultura alicantina', agrega el escritor Enrique Cerdán Tato. Una de las múltiples respuestas a esta cuestión la apuntó el escultor Arcadi Blasco, quien recuerda cómo 'en esta ciudad no hay una burguesía culta'. El periodista José Ramón Giner utiliza la arquitectura para radiografiar lo que es una ciudad. 'Sólo hay que ver el urbanismo de Alicante, ¿qué tipo de cultura esperamos?', se cuestionó el periodista. 'Si la izquierda, cuando gobernaba, fue incapaz de relanzar el Museo de la Asegurada y destrozó el puerto, ¿qué podemos esperar de la derecha?', añadió Giner. Estas y otras preguntas se plantearon anoche en la sede del PSPV de Alicante. 'Se trata de iniciar una serie de debates que nos permitan conocer en qué situación nos encontramos, y cuáles son las demandas', dijo Gerardo Muñoz, organizador del ciclo.

Todos los participantes denunciaron el 'intervencionismo' del PP en la actividad cultural, tanto a la hora de programar, como en reparto de subvenciones. Cerdán Tato sostiene que existe una confusión generalizada de la oferta cultural. 'Para algunos todo es cultura y todo está al mismo nivel', matiza el cronista oficial de Alicante al recordar la promoción que el PP hace de los toros, las Fogueres, la Semana Santa o el fútbol. Emilio Soler, profesor de Historia de la Universidad de Alicante, considera que la creación de una adecuada infraestructura cultural, el apoyo a los creadores y las facilidades que se habían establecido durante los gobiernos socialistas, ahora 'se han desarmado'. 'Al artista debemos no molestarle y dejarle trabajar en paz', rogó Cerdán Tato.

El escultor Arcadi Blasco reconoce que 'jamás se había hecho tanto por la cultura', en referencia a la política que realiza el PP. 'Pero también debemos valorar, con qué criterio se hace la política cultural, y bajo qué conceptos', agregó. 'Ahora los que manejan los resortes culturales, ni les interesa ni saben lo que es la cultura', apunta Cerdán Tato. Para el escritor esta etapa le recuerda 'al franquismo, cuando el artista molestaba y era incómodo para el poder político'.

A modo de ejemplo, la concejal socialista Carmen Sánchez Brufal recordó el escaso interés que el PP muestra por el patrimonio. En el Ayuntamiento de Alicante el presupuesto para recuperación del patrimonio artístico ha ido decreciendo. De los 115 millones de pesetas (690.000 euros) de hace tres años, se pasó a los 39 millones previstos para este año (234.000 euros). 'Sin embargo, para la difusión cultural el concejal de Cultura, Pedro Romero dispone de todo el dinero que quiere', asegura Sánchez Brufal.

Todos los participantes dibujaron un panorama cultural pobre, y destacaron los méritos que grupos independientes y artistas noveles están realizando fuera de los cauces institucionales para poder mantener su independencia y actividad.