Empuje externo

La Bolsa de Nueva York consiguió ayer superar, y mantener, el nivel de los 10.000 puntos durante el tiempo que coincide en horario con los mercados europeos, lo que generó la confianza suficiente como para que el dinero se mostrara más animado que en las jornadas precedentes.

El Ibex 35 subió el 1,96% y el índice general de Madrid el 1,73%, lo que les permitió recuperar los niveles de los 8.000 y los 800 puntos, respectivamente, algo que empieza a ser una anécdota debido a las reiteraciones.

El Mercado Continuo negoció en esta ocasión 2.281,76 millones de euros, 379.653 millones de pesetas, un 45% más que el día anterior y con sólo el 20% del total obtenido a base de operaciones institucionales. Esta cifra de contratación es la más alta desde el pasado día 10 de enero, lo que puede ser un buen indicio en el supuesto de que se mantenga el nivel en los próximos días.

El empuje del mercado estadounidense como causa principal de este tirón de las bolsas europeas se puso de manifiesto tras las ambiguas declaraciones del BCE, que constató la existencia de múltiples indicios de recuperación en la zona euro, pero de los que no puede deducirse la fecha de comienzo ni la magnitud.

El euro fue el encargado de acusar el golpe y cayó en pocos minutos desde los 0,8710 dólares en que estaba cotizando hasta 0,8682. El cambio oficial fue de 0,8693 dólares, aunque a última hora de la tarde recuperó posiciones para cotizar a 0,8732.

La Asociación Española de Banca tampoco les puso las cosas fáciles a los inversores españoles, al ser la primera en anunciar un descenso en las expectativas de crecimiento del PIB para este año. Según la AEB, el PIB crecerá en este ejercicio el 1,8%, en lugar del 2,4% que prevé el Gobierno, lo que coincide con las revisiones efectuadas hasta ahora por Alemania y Francia.