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Columna
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El turismo como excusa

El fomento del turismo se ha convertido en un negocio en sí mismo, al margen de su finalidad, siguiendo un proceso mimético al acometido por sindicatos y patronal con el fomento del empleo. Al igual que la 'paz social', el apoyo del PA al Gobierno de la Junta tiene ese precio: el despilfarro.

Este año el Gobierno ha multiplicado por cinco su presupuesto en Fitur sin más provecho aparente que el natural contento del consejero del ramo, José Hurtado, orgulloso de que Andalucía se presente 'única y unida (...) por primera vez en la historia del turismo mundial (sic)'.

Para lograr este récord, los andaluces hemos puesto unos seiscientos millones de pesetas sólo en el pabellón, sin contar el dispendio publicitario para dar a conocer lo que Hurtado -que, sin duda, no necesita abuela- considera 'uno de los eslóganes de mayor acierto en los últimos años en el mundo de la comunicación'. Supongo que el lector ya conoce el eslogan, pues lo habrá visto repetido en anuncios a toda página y a todo color: 'Andalucía sólo hay una'.

Paradójicamente, buena parte del gasto de la promoción del turismo se hace dentro de nuestra región, de forma que se han dilapidado decenas de millones en dar a conocer a los andaluces que la representación de la Junta estaba en el pabellón número 5 de Fitur... en Madrid.

La Consejería de Turismo nos tiene acostumbrados a estos derroches, como aquella interminable campaña que mostraba en los medios de comunicación andaluces lo contentos que estaban los extranjeros que viven aquí -cosa por otro lado evidente, pues si no estuvieran contentos ya se habrían marchado-, o como esas páginas dedicadas al turismo del golf que no aparecen en periódicos extranjeros, sino en periódicos andaluces.

Pero la Consejería de Turismo no es la única que sigue esta exótica política publicitaria. Cuando los socialistas volvieron a gobernar en la Diputación malagueña, denunciaron que el PP había gastado la mayor parte del presupuesto del Patronato de Turismo en medios de la provincia de Málaga. Se ve que, al final, les gustó la idea, porque el PSOE ha seguido haciendo lo mismo. En vez de promocionar el turismo -al fin y al cabo los turistas van a seguir viniendo igual- se han puesto a promocionar a la gerente del Patronato para presentarla a las primarias de la alcaldía de Málaga.

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Con dinero destinado al fomento el turismo, se ha mimado a los periodistas malagueños, se los ha llevado de viaje a Nueva York y se ha repartido publicidad a mansalva entre los medios de la provincia hasta conseguir que la gerente salga en muchas fotos.

Hace tiempo que en Fitur no se hacen negocios. Se ha convertido en un catetorro escaparate de políticos que arrastran tras de sí a todos los periodistas que se dejan invitar, que por desgracia son muchos. No hay alcalde ni concejal de turismo, de cualquier color o partido, que no tenga así su día de gloria en las televisiones locales de su pueblo.

Y todo, gracias al dinero público. Que siga la juerga.

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