'Los mismos que plantearon el problema ético al aborto cuestionan el uso de células madre'
Carlos Belmonte, doctor en medicina, director del Instituto de Neurociencias de la Universidad Miguel Hernández de Elche, y científico con una amplia y dilatada carrera investigadora valora la polémica suscitada a raíz de los problemas que está afrontando su compañero, Bernat Soria, para investigar con células madre embrionarias un método novedoso para tratar la diabetes. Belmonte exige, también, más recursos económicos para la investigación.
Pregunta. ¿Qué ha pasado con la polémica que ha generado el profesor Bernat Soria?.
Respuesta. Es un ejemplo claro de las dificultades con las que se tendrá que enfrentar la ciencia en los próximos años y, en términos objetivos, creo que hay que tomar una decisión. El caso de las células madre de origen embrionario plantea un problema ético, igual que lo planteó el aborto hace 40 años, en el fondo y detrás están las mismas ideologías.
P. ¿Llegó el momento de recuperar el debate entre ética y ciencia?
R. Creo que sí, como ocurre con la mayoría de los problemas, sólo las soluciones de comité conjuntas son válidas. Nadie puede arrogarse la verdad en un tema tan conflictivo, y hay que establecer consensos sociales. Yo no voy a convencer a un señor, que tiene profundas ideas religiosas, que las células de un embrión congelado in vitro no tienen alma humana. Eso está fuera del nivel de discusión que podemos establecer los científicos, es una creencia que respeto, pero no comparto.
P. ¿Qué se juega la comunidad científica si hay fisuras?
R. Yo dudo que haya confrontaciones entre nosotros, la comunidad científica tiene unas cualidades positivas: es de un internacionalismo absoluto y está por encima de ideologías. Yo tengo colegas israelitas y palestinos que trabajan juntos a nivel científico, y discrepan profundamente en su visión del problema en Oriente, pero son magníficos investigadores.
P. ¿Y cómo valora la actitud del gobierno español en en el caso de Bernat Soria?
R. Mi único reproche, en este tema, es que no se puede paralizar un proyecto sin argumentos. El Gobierno debe gobernar, y eso significa que cuando hay problemas se deben buscar soluciones lo antes posible. El Ejecutivo se escuda en que se está discutiendo a nivel europeo, y es cierto, pero por otra parte debería tener una cierta agilidad en resolver el problema de Bernat Soria, que quiere hacer un trabajo interesante. Considero que también los medios de comunicación lo han magnificado, no hay que dramatizar, y caer en los tópicos de que 'aquí no se puede hacer ciencia', en el franquismo eso tenía sentido, pero ahora no.
P. Con la polémica vivida estos días ¿cree que estamos en el preludio de lo que puede ocurrir en el futuro?
R. Creo que debemos autorizar, con todos los condicionantes éticos que se quiera, el uso de células madre para la investigación, y si no se hace se corre el riesgo de que el científico se vaya. Aunque no me gusta contribuir a dramatismos que no son reales, los científicos hoy nos movemos, colaboramos con equipos de otros países, y la ciencia es internacional.
P. ¿Y las reticencias del Gobierno español a qué se deben?
R. Me gustaría que lo explicaran ellos. Creo que no tienen una opinión clara y definida en este tema, y una de las cosas que se debe hacer es exigir que el Gobierno tome un decisión política, debe escuchar a todas partes y luego decidir, que para eso les han votado.
P. Hablemos de la evolución de la investigación científica en España.
R. Hubo un periodo, hasta el año 95, en el que la ciencia española cambió totalmente, con Juan Rojo de secretario de Estado, alcanzamos la ilustración científica, una etapa en la que se dieron grandes pasos. Después ha ido más despacio, a medida que hay más científicos el crecimiento es asintónico, se requiere más dinero y más esfuerzo. Y este Gobierno, a nivel nacional, con el plan Ramón y Cajal avanza un paso cualitativo importante, pero no suficiente. Y la nueva LOU también introduce tesis progresistas, al presentar la ciencia dentro de la Universidad como una actividad diferenciada, pero está claro que es necesario más dinero.
P. Sin embargo, las noticias sobre la precariedad de los investigadores, la fuga de cerebros o la falta de recursos económicos son constantes.
R. Me gusta matizar, los científicos españoles presentes no estamos tan mal como dicen, las ayudas que se dan son pequeñas pero como hay pocos científicos se reparte poco entre pocos, y todos tenemos algo. La escasez no la notamos tanto como los alemanes o los ingleses. Pero el gran problema que tiene la ciencia española es que se requieren más recursos económicos para personal, para generar científicos. Nos estamos quedando sin científicos jóvenes, no hay vocaciones porque la ciencia es dura y sacrificada. La ciencia la tienen que hacer profesionales que gocen de un salario digno, no se puede esperar que la ciencia quede en manos de personas, con vocación casi sacerdotal, que han decidido sacrificar su vida personal como ha ocurrido hasta ahora. La inversión debe ser en la formación de gente joven y garantizarles un trabajo estable.
P. ¿Y la LOU, comentaba que introduce algunas novedades en este sentido?
R. La reforma ofrece la posibilidad a que la investigación se encardine en la universidad en igualdad de condiciones, al menos así lo he leído yo. Si la LOU consigue que en la universidad un investigador, que se dedica a la ciencia, pueda participar en algunos cursos de pregrados o ciclos, pero que fundamentalmente se dedique a investigar, será un gran paso. Y creo que la LOU abre la puerta para eso, porque permite la contratación de científicos, que no necesitan ser profesores, se pueden contratar a investigadores desde la propia universidad. Pero está claro que si no hay dinero detrás no hay nada que hacer.
P. Una vez más plantea el problema económico...
R. Porque o se pone más dinero, o no podemos ofrecer una ciencia competitiva.
P. ¿Y eso es tarea del Gobierno central?
R. Es una responsabilidad del Gobierno cien por cien, también a la iniciativa privada, pero el Gobierno debe dar el primer paso.
P. Si esa demanda de más inversión en investigación no se cumple ¿qué nos jugamos?
R. Creo que llevamos unos cuantos años que estamos en una meseta, y eso quiere decir que cuando los demás crecen nosotros no, estamos igual. Si no se invierte más, de inmediato, perderemos el tren del futuro y nos quedaremos detrás.
'Las prisas electorales me resultan sospechosas'
P. Usted fue uno de los promotores de la Universidad Miguel Hernández de Elche. Concluido el proceso constituyente, ¿cómo valora la gestión realizada? R. Teniendo en cuenta las dificultades iniciales creo que se ha hecho una labor estimable y buena. Se han cometido errores, ha faltado dinero para garantizar la estabilidad del personal docente y creo que llega el momento de hacer elecciones. P. ¿Se debe acelerar el proceso electoral ante la incertidumbre actual? R Yo me pregunto por qué se pone tan nerviosa la gente en este tema. Ahora la estructura de gobierno legal funciona bien y está legítimamente nombrada por el Consell, entonces el proceso de cambio debe llevar su tiempo. No creo que sea tan importante hacer elecciones la próxima semana, todos queremos que sea pronto. Pero a mi las prisas me resultan sospechosas. No sé bien qué hay detrás de esta premura electoral, es una manera de generar ruido. P. ¿Y qué le parece el foro de debate crítico Miguel Unamuno creado en esta Facultad de Medicina? R. Es bastante inédito, me parece estupendo que se opine, pero que se establezca una especie de oposición institucionalizada resulta inédito. En todas las universidades en las que he estado, y han sido muchas, no he visto nunca que se recurra a un sistema tan institucionalizado como aquí. Personalmente lo respeto. P. ¿Cree que las elecciones pacificarán los campus? R. Deseo que haya elecciones para ver quién está detrás de cada cual, porque hablar en nombre de unas personas es muy fácil, pero hay que medir las fuerzas que tiene cada uno en las urnas.
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