Arranca el Fòrum 2004 sin jefe de filas

El Fòrum 2004 arrancó ayer de forma definitiva con la presentación de su programa, pero nace sin jefe de filas por falta de acuerdo entre las tres administraciones. Ya no hay marcha atrás. Tal vez por ello, fue el primer acto en el que se evidenció el consenso en cuanto al evento, y así lo reflejaron en sus discursos el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol; el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, y el alcalde de Barcelona, Joan Clos. Tanto ellos como el príncipe Felipe, que presidió el acto, subrayaron que el Fòrum es un reto para abrir un diálogo real entre las culturas.

Hace casi un año el Fòrum 2004 presentó un anteproyecto de lo que se pretendía organizar en Barcelona durante cinco meses. Era un esbozo de tres grandes exposiciones y un calendario de actividades festivas aproximado. El programa que se presentó ayer empieza a concretar más, pero sin detallar demasiado qué ni dónde, ni quién acudirá a Barcelona. Debates, congresos, exposiciones y toda una diversidad de actos festivos se sucederán a lo largo de 141 días. La duración prevista del Fòrum se ha recortado en 15 días: arrancará el 9 de mayo y finalizará el 26 de septiembre, con las fiestas de la Mercè. Tanto el arranque como el punto final tendrán lugar en el espacio del Besòs. Se ha superado ya la fase de proyecto y ahora hay que concretar calendarios y agendas.

Barcelona concentrará durante casi cinco meses 34 congresos internacionales, 800 actividades artísticas y algunas cumbres, como la de los premios Nobel de la paz, una conferencia internacional de televisiones públicas y una reunión extraordinaria del Club de Roma. El Fòrum espera recibir cinco millones de visitantes y tener 500 millones de personas de audiencia en los medios de comunicación. El evento, definitivamente, se abrirá al resto de la ciudad, de manera que las tres grandes exposiciones y los principales actos se celebrarán en el espacio Fòrum, en toda el área que se está transformando junto a la desembocadura del Besòs, pero gran parte de la oferta cultural -y también artística- se desarrollará en los principales escenarios culturales de la ciudad: el MNAC, el CCCB, el Liceo y el Auditori, entre los más importantes.

Entrada mínima

Por la misma razón se ha modificado la intención inicial de cobrar una entrada de unas 3.000 pesetas para el recinto del Besòs. Según el alcalde, se cobrará un mínimo de 900 pesetas para acceder al espacio central y se buscará un sistema de bono o tarjeta electrónica -con un precio que ya se determinará- para asistir al resto de la oferta cultural. De esa manera, el precio que pague cada visitante se ajustará a los espectáculos o actos a los que asista.

Clos, en la conferencia de prensa previa al acto de presentación, anunció que el presupuesto inicialmente pactado de 51.500 millones de pesetas -de los que el 38% será aportado por las tres administraciones que forman parte del consorcio- será ajustado en reuniones que se celebrarán cada seis meses 'en función de cómo se concreten los actos'. Y aclaró que esa revisión tenderá a la contención.

Sin embargo, el programa aprobado ayer supone un incremento de 1.400 millones de pesetas, ya que se ha pasado de 51.500 a algo más de 52.900. Y parte de ese aumento de ingresos parece proceder, según el programa, de la aportación de las administraciones.

Lo que no precisó el alcalde es cómo va la aportación de capital por parte de los socios patrocinadores, y de sus palabras se dedujo que si estos ingresos no se acercan a los calculados, unos 14.000 millones de pesetas, el presupuesto se irá ajustando a la realidad de los recursos. En el documento que recoge el programa se hace referencia a un 'presupuesto evolutivo'.

Ni el alcalde de Barcelona, ni los principales responsables de la organización del Fòrum quisieron referirse ayer al hecho de que éste todavía no tenga consejero delegado. Sin embargo, fue uno de los temas más recurrentes al final del acto de presentación. No se quiso abundar en si el perfil del rector de la Universidad Politécnica de Barcelona (UPC), Jaume Pagès, es el más idóneo para el cargo. El rector de la UPC, por su parte, desmintió ayer en un escueto comunicado que hubiera recibido ninguna propuesta de cargo del Fòrum 2004.

Antes de la ceremonia de presentación, el concejal de Cultura, Ferran Mascarell, explicó que el Fòrum tendrá ocho formatos, 'algo así como las pruebas de unos Juegos Olímpicos', dijo. Con uno de ellos se persigue que Barcelona sea el foro de diálogo 'más importante del mundo', basado en los tres ejes principales del evento: la diversidad cultural, las distintas formas de vivir y la sostenibilidad. La segunda de las pruebas del Fòrum serán las exposiciones; las tres ya definidas en el anteproyecto, que se desarrollarán en los escenarios principales del Fòrum, son las tituladas Viejos y nuevos mitos, Habitar en el mundo y Del sonido a la voz. Estas exhibiciones se completarán con otras ocho que tendrán lugar en los principales equipamientos culturales de Barcelona, ya que se venía reclamando insistentemente que el Fòrum no fuera algo que se limitara al recinto del Besòs y, finalmente, así ha sido.

Fiestas en la plaza

Algunas de estas exposiciones versarán sobre La guerra (Centro de Cultura Contemporánea), Las artes primeras (Museo de Historia de la Ciudad), El arte de las religiones (Museo Nacional de Arte de Cataluña) y El Mediterráneo (Museo de Historia de Cataluña). Las fundaciones de La Caixa y de la Caixa de Catalunya también organizarán exposiciones que todavía 'están sin determinar', según el programa.

El tercer formato del evento se basa en la diversidad y se expresará en un conjunto de exhibiciones que se podrán visitar en la explanada del Fòrum y en el puerto de Sant Adrià. Ese espacio tendrá actividades permanentes, como un mercado de artesanos y muestras de las gastronomías del mundo, y otras itinerantes que se organizarán en torno a fiestas con temas como la democracia, las libertades y el diálogo.

Será ese espacio el que acogerá algo parecido a una monumental fiesta de la diversidad. Y también será el escenario de la celebración de jornadas especiales, como el Día de Europa -que será precisamente el de arranque del Fòrum- y el Día de la Música, entre otros. El Fòrum tiene previsto celebrar 11 días internacionales distintos, además de todo tipo de fiestas tradicionales y populares.

El cuarto formato es el llamado de la creatividad y se plasmará en el Festival de las Artes, que ya ha programado el estreno mundial del espectáculo que dirigirá Peter Brook, basado en la obra del escritor de Malí Amadou Ampaté, sobre el proceso descolonizador que sufrió ese país. También en este epígrafe se incluye un espectáculo sobre la ciudad de Barcelona que prepara Pina Bausch.

Existirá un formato denominado de experiencias, otro de solidaridad, un espacio virtual -el Fòrum virtual empieza en enero próximo- y, por último, un programa educativo.

El Fòrum se presentó inicialmente como un gran foro en el que cabrán todas las opiniones y los sectores. Hace unos meses, por ejemplo, coincidiendo con los incidentes que se produjeron en varias ciudades por movimientos antiglobalización, responsables del proyecto aseguraron que esas voces tendrán cabida en los actos del Fòrum.

Sin embargo, en el calendario provisional del programa no se ve esa presencia por ninguna parte. Mascarell comentó que el Fòrum podría acoger un encuentro de premios Nobel alternativos y una conferencia de la Acnur.

El espectáculo inaugural del Fòrum se realizará coincidiendo con la conferencia de los Nobel de la Paz. Se trata de un gran concierto que interpretarán la Orquesta Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya, y la del Liceo. La obra escogida es el Réquiem de guerra, de Benjamin Britten, y lo dirigirá Mstislav Rostropóvich.

La clausura tendrá lugar enla explanada central del Fòrum y, entre otros espectáculos, incluirá un especial piromusical. El punto final de contenido será la llamada Declaración de Barcelona. Un compromiso para las nuevas convivencias.