La actividad económica de Castellón se resiente por el retraso en conceder permisos de trabajo

El atasco en la tramitación de los permisos de trabajo correspondientes al último proceso extraordinario de regularización de inmigrantes no sólo colapsa las oficinas de extranjeros sino que impide que los empresarios cuenten con la mano de obra extranjera que necesitan para mantener la actividad de sus empresas. Los Colegios Oficiales de Graduados Sociales, de Abogados y de Gestores Administrativos de Castellón denunciaron ayer esta situación que provoca la fuga de inversiones ante la falta de trabajadores o la proliferación de mafias.

La nueva Ley de Extranjería exige a los empresarios la contratación de inmigrantes regularizados. Sin embargo, esto no es fácil. El bloqueo existente en las oficinas de extranjeros impide una tramitación ágil de la documentación y, por tanto, un acceso de inmigrantes a las empresas al ritmo que requieren los empresarios. Graduados sociales, abogados y gestores administrativos aseguraron ayer en Castellón que existe una grave falta de medios técnicos y humanos para la tramitación de expedientes de extranjeros ya que, tal como señaló Antonio Figueredo, miembro de la junta de gobierno de los graduados sociales, seis funcionarios han de atender cada día a unas 700 personas. Además, se da el agravante de que no existe una oficina única, que sí hay en Valencia y Alicante, con lo que la tramitación se realiza en tres dependencias distintas: la comisaría de policía, la delegación de Trabajo y la Subdelegación del Gobierno.

La principal consecuencia de esta falta de medios es el colapso de expedientes de todos los extranjeros (comunitarios y extracomunitarios) que han de recibir un Número de Identificación de Extranjero (NIE) para realizar cualquier trámite. El retraso en la concesión de este número se ha cifrado en un año y la obtención del mismo es necesaria tanto para la consecución de un permiso de trabajo como para la apertura de una empresa con capital extranjero. Además, desde hace semanas, según aseguró Figueredo, el NIE no se concede a quienes no acrediten estar en situación legal. Según el presidente del Colegio de Graduados Sociales de Castellón, Francisco Dalmau, el colapso afecta a la actividad económica castellonense. Se ha dado el caso, según un documento firmado por los presidentes de los tres colegios y entregado al Subdelegado del Gobierno, de un alemán que, con la intención de invertir 1.000 millones en la creación de una empresa, haya topado con que para conseguir la tarjeta de residente comunitario tenga que esperar casi un año en la obtención del NIE necesario para empezar a trabajar o solicitar su alta en el Impuesto de Actividades Económicas. 'Éste es un ejemplo pero no ha sido el único', dijo Antonio Figueredo. El colapso 'está perjudicando al dinamismo de la industria'. El problema no sólo influye en la 'fuga' de inversiones 'que conllevan la creación de riqueza y de puestos de trabajo', sino también en inversiones inmobiliarias ya que el NIE es igualmente necesario para tramitar escrituras ante notario, pagar impuestos o cotizar a la Seguridad Social. En este caso, según un documento firmado por los representantes de los tres colegios y entregado al Subdelegado del Gobierno, 'se genera un descontento que va creciendo entre los contribuyentes, notarías, multas de Hacienda por, entre otros motivos, no poder pagar a tiempo'. En el caso de los trabajadores, los problemas se agravan por su situación. El colectivo de graduados sociales, abogados y gestores tramitan, generalmente, los permisos de trabajadores contratados, en un proceso que, según denunciaron ayer, se prolonga hasta cerca de 18 meses en Castellón, 6 en Valencia y 3 en Alicante. Los retrasos provocan, por un parte, que haya inmigrantes trabajando en situación irregular, dada la espera a la que han de someterse para lograr el permiso. Y por otra, que los empresarios contraten a otras personas antes de esperar que se resuelva la regulariación.

En este sentido, según mantuvo Figueredo, el inmigrante se encuentra con un permiso de trabajo para una empresa que ya no le requiere. Además, este número, por ejemplo, es necesario para el logro de atención sanitaria. Así, el conocimiento por parte de los extranjeros de toda la problemática aumenta la proliferación de mafias. Los colegios de Graduados Sociales, Abogados y Gestores Administrativos han querido dejar patente el reconocimiento personal e institucional a los pocos funcionarios que tramitan cuestiones de extranjería y han ofrecido su colaboración a la Subdelegación de Gobierno.