El teatro Malic presenta un triángulo amoroso protagonizado por títeres

Melodama es un espectáculo de marionetas de guante creado por Jordi Prat, Eugenio Navarro y Martí Doy. Pero es una pieza que rompe con todas las convenciones del género, esencialmente en tres aspectos: es un espectáculo sin palabras inspirado en el cine mudo, se dirige a un público adulto y utiliza dos teatrillos como escenarios simultáneos de la acción. La pieza, un triángulo amoroso, se estrenó el pasado verano en el festival de teatro de Sitges y hasta el 18 de noviembre se presenta en el teatro Malic de Barcelona.

Una música compuesta especialmente por Matías Torres y un juego narrativo consistente en contrastar la placidez formal con la dureza de algunas de las situaciones descritas marcan el ritmo del espectáculo, dirigido por Prat. 'Yo buscaba que fuera algo aparentemente bonito para después ir metiendo bombas inesperadas por el público', explica el director. Un oscuro juego de seducción con violaciones y suicidios en escena son algunas muestras de la carga explosiva del montaje. Aunque en Melodama no hay ningún personaje bueno, sino que todos son malos en una amplia gradación y la historia 'se va tiñendo de negro' progresivamente, la obra está repleta de humor: 'Intentamos darle la vuelta al melodrama, jugamos con las convenciones del género', indica Prat.

Al desarrollarse en dos teatrillos, el público no puede dejarse llevar por la pasividad: su interés continuo es fundamental para no perderse en el desdoblamiento y la simultaneidad de escenas. Todos los cuadros están perfectamente estudiados y encajados, en una maquinaria ideada a lo largo de siete meses de ensayo. Un plazo enorme si se tiene en cuenta que Navarro, un experto marionetista con un cuarto de siglo de dedicación a sus espaldas, invierte una media de seis semanas en cada nuevo espectáculo.