Guerra 'bichitológica'

1. Un Gobierno estrafalario tiene sus ventajas: somos más felices. Por ahí fuera andan preocupados con el ántrax, cuando lo único que hay que hacer es ir al médico. En lugar de Mariano Rajoy, a Washington debería haber ido Celia Villalobos. 'Mira, con la guerra bichitológica esa, lo mejor es ir al médico. Al de cabecera, pa que no se colapsen las urgensias, hazme caso, Di Chini, como te llames'. A continuación, el vicepresidente Dick Cheney recibiría al director general de la Policía. 'Mira, Dick, es importante exigir que los terroristas estén coordinados, porque si no, no hay manera. En España hemos tenido un lío por culpa de unos terroristas descoordinados... Suerte que la grúa se llevó el coche bomba. Cuando les pille me van a oír'. Después, Aznar en persona: 'Menuda obsesión tenéis con eso de ganar la guerra de la propaganda y de la información. Fíjate en mí: he ido al Parlamento ¡este jueves! Créeme, Dick, de esto de la guerra, ni una palabra. Yo no comento nada a nadie, porque sólo confío en mí mismo.' Tras esto, ¿a Dick Cheney se le acabarían los problemas? No, pero sería más feliz: 'Qué curiousos los payasitos españoules', pensaría, reconfortado. En la puerta aún le asaltaría Trillo: '¿Y seguro que no necesita usté nuestras tropas, aunque sea un soldadito simbólico, yo mismo?'.

Cualquier día se harán un lío y saldrá Arenas en el telediario denunciando que los hermanos de Rato son socialistas

2. Suerte que acaba la campaña gallega. Cuando manda la Junta Electoral, las televisiones son un tostón. De los telediarios del fin de semana, por ejemplo, desaparecen los jardines privados de los ministros. Recomiendo el de Cristóbal Montoro. Muy austero: un poco de hierba, un pino y seto artificial. Desde ahí proclama que Gescartera es socialista. El jardín de Piqué es más desahogado: se adivina una duna suave. Ahí comentó que lo de Ercros fue socialista. El jardín de Rato sí que es bueno; se nota dónde hay categoría. 'No tenemos nada que ocultar', dice Rato, y nunca sé si se refiere al Gobierno o a sus hermanos. Cualquier día se harán un lío y saldrá Arenas en el telediario denunciando que los hermanos de Rato son socialistas.

3. Pero Zapatero es un señor. Por más que le provoquen, él no pierde de vista su objetivo: que no haya crispación con el PP. Eso lo tiene bastante conseguido. Otra cosa es que tenga a su partido completamente crispado con tanto pacto. Ahora bien, cuando se pone firme... 'Me han roto un pacto y no lo tolero. O rectifican o... o... ¡o no pacto más!'. Cachis los talibanes, que tío más duro, deberían poner dos rombos cuando sale por la tele. (En el PSOE andan todos rezando: que no rectifique Rato, por Dios, que no rectifique).

4. Pero sí, Rato debería haber rectificado para salvar el reparto de jueces. ¿Qué le costaba salir muy serio en el telediario de las nueve? 'Queridos españoles: rectifico. Insinué que con esto de los jueces hubo mercadeo, cuando todo el mundo sabe que la política es un arte puro de ángeles sin sexo que buscan el interés general y que jamás reparan en relaciones de amistad ni parentesco'. Y ya está, todos tan amigos. Y ya cada español podría gritar delante de la tele como el ogro Shrek: '¡Y yo voy y me lo creo!'.