Portazo nacionalista al proceso de paz en Córcega
El proceso de paz para Córcega sufrió ayer un nuevo golpe a causa de la ruptura anunciada por Corsica Nazione, el único grupo independentista representado en la Asamblea de Córcega, donde cuenta con ocho de los 51 escaños. Los nacionalistas rompen con los compromisos adquiridos, fundamentalmente la renuncia a la reivindicación independentista a corto plazo y la aceptación de un estatuto de autonomía, que el primer ministro, Lionel Jospin, había pactado con los corsos a cambio del cese de la violencia. El detonante de la decisión fue la detención de nueve militantes nacionalistas, el pasado fin de semana, que fueron puestos en libertad cinco días después sin cargo alguno. El líder del nacionalismo corso, Jean-Guy Talamoni, considera que la policía no ha hecho más que 'torpedear y desacreditar' el proceso de paz, con una investigación en la que él mismo ha sido convocado a declarar. Talamoni y otras personas próximas fueron señalados como inductores o ejecutores de varias muertes en la isla, y denunciados por el asesinado François Santoni, uno de los históricos del movimiento corso.
