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Diez menores usaban Internet para realizar actos vandálicos en Valencia

La policía les imputa quema de vehículos y daños al mobiliario urbano

Diez menores, cuyas edades oscilan entre los 15 y los 17 años, utilizaban supuestamente Internet para planificar actividades vandálicas en Valencia. La Policía Nacional detuvo el pasado viernes a una parte de los miembros de este grupo, a los que imputa delitos tales como la quema de coches, allanamiento de morada o destrozo de mobiliario urbano. A través de una página web, que no se encuentra ya colgada en la red, los menores intercambiaban información sobre explosivos y señalaban sus objetivos, dice la policía. Los diez detenidos, a los que según fuentes policiales podrían sumarse otros tantos, funcionaban como un 'comando' y tenían como lema 'la razón manda'.

Un grupo de amigos, con drogas y alcohol como afición común, se convirtió en una banda que ha alcanzado una estructura y modo de actuación que les vale la calificación de 'comando' por parte de la policía. De las copas, el hachís y otros estupefacientes pasaron a formar un operativo escondido en la red (www.galeon.com.rsm), bautizado como RSM -las siglas que recogen lo que consideraban su máxima: la Razón Siempre Manda- y dedicado, tal como rezaban los mandamientos albergados en el directorio de la página de entrada en Internet, a practicar todo tipo de fechorías. 'Matarás, robarás, fumarás...' eran parte del catálogo de actuaciones.

La fiscalía de menores ya tiene el caso sobre la mesa. La operación policial no se ha dado por concluida. De hecho, las fuentes consultadas de la Policía Nacional y Delegación del Gobierno anunciaron ayer la detención en las próximas horas de otros menores implicados, al menos 10. De las investigaciones y las declaraciones de los detenidos el pasado viernes, se desprende la participación de los menores en una decena de delitos cometidos en Valencia. Fuentes policiales presumían ayer que este grupo podría ser el responsable de la ola de quema de vehículos que en los últimos 18 meses ha afectado a unos 400 coches en la capital.

No todos los detenidos han participado en todos los hechos. Ni siquiera todos son autores materiales de los delitos que se les han imputado. Unos han actuado de cerebros y otros de ejecutores. La policía sostiene su implicación, de momento, en el incendio de cuatro contenedores, un depósito de serrín, daños de rotura de cristales y pintadas en un instituto de Valencia entre los días 17 y 24 de abril; el incendio de un camión valorado en 12 millones de pesetas en la noche del 25 de mayo; la quema de una casa en la calle de Tomás de Villarroya la noche del 8 de julio; el incendio de un campo rural y caseta la madrugada del 11 de julio; 325 cristales fracturados, daños en una motocicleta, incendio en un depósito de serrín y pintadas entre los días 6 y 24 de agosto; y el robo de material escolar de un colegio público en agosto.

Ni la policía ni la Delegación del Gobierno precisaron ayer cuánto tiempo llevaba actuando el grupo de menores ahora detenidos.

Buenos chicos

Son de Valencia. Tienen en común locales de ocio, curiosidad por los estupefacientes y consumo de alcohol ligado a la fiesta. Entre los diez menores, según fuentes policiales, hay de todo, pero nada que hiciera pensar en qué invertían parte de su tiempo en la red. Alguno de ellos es especialmente hábil con los lenguajes capaces de generar una página web, tanto como para crear el punto en Internet donde mostrar quiénes eran La Razón Siempre Manda. Algunos familiares de los menores afirmaron no haber sospechado siquiera que su hijo pudiera ser capaz de cometer un delito como los que ahora se les imputan. Alguno cree que nada tiene que ver la página, localizada por la policía cuando rastreaba la pista de un grupo anarquista, con las fechorías.

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