Presidencia como premio

Manuel Cobo, consejero de Presidencia en 2000, recibió en mayo de ese año una pesada carga de manos de Alberto Ruiz-Gallardón. Antonio Beteta, en aquel momento consejero de Hacienda, abandonaba el Gobierno regional con destino a una secretaría general del Ministerio de Hacienda. Ruiz-Gallardón, que buscaba alguien en quien confiar las arcas de la Comunidad que había abandonado Beteta, halló en Cobo la persona de confianza necesaria. Pero no le dejó que se deshiciera de Presidencia, así que le cargó con ambos fardos. Manuel Cobo se convertía así en el primer consejero de Presidencia y Hacienda de la historia del Gobierno madrileño.

Pero tanto peso sobre sus hombros ha tenido ahora su recompensa. Cobo volverá a soltar el lastre de Hacienda y se situará un poco más cerca del presidente. En sus cercanías seguirá también Luis Eduardo Cortés, vicepresidente del Ejecutivo regional y consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, que fue premiado en 1999 por Ruiz-Gallardón con la vicepresidencia por haber construido entre 1995 y 1999 37,5 kilómetros de túneles, 18,3 de vía en cielo abierto y 39 estaciones de metro.

Cortés, que no suele ejercer como vicepresidente, ha conseguido además elevadísimas inversiones en la región (parque de la Time Warner, parque de esquí en Arroyomolinos, parque biológico en Valdebernardo...), además de haber aumentado la red de carreteras y autovías de la región.

De esta nueva y sorpresiva remodelación del Gobierno, Cortés no sale afectado. No ha perdido ninguna de sus competencias (Obras Públicas, Urbanismo y Transportes). Pero ahora sabe que Manuel Cobo, sin ostentar el cargo de vicepresidente, comienza a elevarse a su misma altura. Serán dos pesos pesados en el mismo Ejecutivo.