_
_
_
_
LA CRÓNICA
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El hombre de negro

Vestido de negro -color que acentuaba aún más su piel morena, de vacaciones recién acabadas, y refrendaba su comentado misticismo-, se presentó ayer tarde ante los periodistas. Algo del todo inusual. No la impoluta indumentaria, habitual en él, sino su comparecencia pública. Tal vez por lo excepcional de la convocatoria, en el Centro Internacional de Prensa se congregaron casi más fotógrafos y cámaras de televisión que plumillas. Inmortalizar el momento era obligado. Tiene guasa que alguien del oficio como él sea tan remiso a salir en los medios. Pero, a Joaquim Maria Puyal no le gustan nada los titulares cuando se refieren a su persona, ni tampoco las instantáneas. Sin embargo, la ocasión lo merecía. Se trataba de informar de la celebración, mañana, de los 25 años de la primera retransmisión de fútbol en catalán a través de Radio Barcelona, en lo que se había anunciado -y subrayado- como 'el único acto público' en el que Puyal iba a hacer declaraciones sobre el citado aniversario.

A Joaquim Maria Puyal no le gustan nada los titulares cuando se refieren a su persona, ni las fotografías

El periodista empezó hace ya un cuarto de siglo el camino que después siguieron todas las emisoras, públicas y privadas, de Cataluña. La fecha histórica es el 5 de septiembre de 1976. Ese día, Puyal se estrenó como locutor en catalán con un partido Barcelona-Las Palmas. Por suerte, la victoria fue para los culés, que ganaron 4-0. La magia se completó esa tarde con un gran gol de Cruyff. Aquel joven guaperas y con inquietudes, que había entrado a trabajar en la emisora de la calle de Casp en 1968, a quien José María García había doctorado en Hora 25 y que, en los albores de la democracia, se empeñó en retransmitir los partidos 'en la lengua que hablábamos en casa y con los amigos', demostró en seguida que, a través del fútbol, también era posible recuperar alguna de las libertades que el franquismo había hurtado.

Puyal acudió ayer a la cita con sus colegas de la prensa arropado por los actuales directores de las dos únicas emisoras que lo han tenido en nómina, y que se han implicado en el festejo: Josep Maria Martí, de Radio Barcelona, y Joan Maria Clavaguera, de Catalunya Ràdio. Ellos hablaron poco. Eran conscientes de que la estrella a quien el auditorio esperaba escuchar vestía de negro y estaba sentada entre ambos. Por eso, Josep Maria Martí se limitó a penas a destacar la 'trascendencia histórica' de la primera retransmisión en catalán después de que 'este país hubiera perdido la propia lengua', mientras que, en una línea similar, el director de Catalunya Ràdio calificó la conmemoración de 'efeméride muy importante' para Cataluña.

Le tocó el turno al protagonista principal del cumpleaños -a su pesar-, quien estructuró su parlamento, muy medido y pensado, en tres ideas. Primera: no le gustaría que la celebración del 25 aniversario del fútbol en catalán se convirtiera en un homenaje a su persona. Segunda: por el contrario, querría que fuese un reconocimiento a todos los profesionales y empresas que contribuyeron a hacer realidad el deseo de un periodista obstinado y que han hecho posible las retransmisiones a lo largo del tiempo. Y, tercera: piensa que es un momento ideal para hacer 'autocrítica' desde dentro de la profesión periodística.

Lo aclaró. 'Mi vanidad ya está suficientemente halagada por otros reconocimientos. No necesito ni quiero homenajes', lanzó en alusión al primer punto. Justificó el segundo expresando 'una extraordinaria gratitud' a los dirigentes del Barça de la década de 1970, a la cadena SER, a La Caixa -entidad patrocinadora desde el primer día del programa-, a Catalunya Ràdio y a los periodistas y técnicos que han trabajado con él todos estos años. 'No es mérito mío', abundó. Y profundizó en el cúmulo de circunstancias que lo llevaron a ser el artífice de esa primera retransmisión, para demostrar que fue él el primero, pero habría podido serlo cualquiera en su misma situación. 'Nací cuando nací -por cierto, la fecha del nacimiento del popular periodista es uno de los secretos mejor guardados-; entré en Radio Barcelona porque dio la casualidad de que Pedro Ruiz se marchaba y necesitaban un locutor; en 1976, tenía ocho años de experiencia; en Madrid se me conocía gracias a José María García, que me había hecho famoso por el apelativo de doctor Puyal que me dedicaba, lo que facilitó el permiso de desconexión de las retransmisiones deportivas a través de la frecuencia modulada, acababa de morir Franco, y se respiraban aires de apertura...'.

En cuanto a la oportunidad de aprovechar la conmemoración para hacer 'autocrítica', Puyal precisó que se refería a una cierta 'complacencia' que se ha instalado en la profesión, que provoca, a su juicio, una excesiva dependencia de los poderes que giran en torno a la prensa: el económico, el empresarial y el político.

A todo esto, ¿y del programa de la celebración qué? Al periodista, casi se le olvida el motivo que le había llevado hasta allí. En el turno de preguntas, se le tuvo que recordar que no había hablado de en qué iba a consistir la conmemoración. 'Va a ser un acto muy simbólico', explicó. Simplemente una fotografía, dijo. Un recuerdo que demuestre que los 25 años de fútbol en catalán 'es una obra colectiva', insistió. En la instantánea, que se tomará en el campus de la Universidad Autónoma de Barcelona, están llamados a figurar todos los profesionales que en este tiempo han contribuido a las retransmisiones deportivas de radio y televisión en catalán.

Más relajado ya por la misión cumplida, se soltó algo al confesar que en los primeros años de la década de 1990 estuvo a punto de dejar las retransmisiones radiofónicas porque la televisión lo absorbía demasiado. Sólo el calor de la gente, y el convencimiento de estar prestando un servicio 'de trascendencia social' lo hizo desistir de su idea. Eso, y tal vez, la íntima satisfacción de escuchar, mientras conduce por la Cataluña profunda, a un novato locutor que, desde una pequeña emisora municipal, comenta que tal futbolista 's'ha escapolit de l'escomesa'.

Joaquim Maria Puyal, ayer tarde, después de presentar los actos del 25 aniversario del fútbol en catalán.
Joaquim Maria Puyal, ayer tarde, después de presentar los actos del 25 aniversario del fútbol en catalán.SILVIA T. COLMENERO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_