Malos olores

Durante esta última semana de agosto, el mal olor en Rivas-Vaciamadrid ha obligado a los vecinos a cerrar las ventanas de sus casas. Por desgracia, esto no es excepcional. Hemos tenido noticias de que el Ayuntamiento de Madrid tiene proyectado destinar una zona limítrofe con Rivas-Vaciamadrid a estacionamiento para vehículos de transporte con mercancías peligrosas.

Según declaraciones de un concejal de Rivas-Vaciamadrid, esto es sólo un rumor, una falsa alarma, porque no han tenido ninguna información sobre el tema (¿esperan una notificación oficial?) y porque en la zona existe una elevada concentración de sustancias contaminantes. Precisamente, esta última razón es la que más nos inquieta.

Creo que el equipo municipal ripense debería ser más diligente en la defensa del medio ambiente del municipio y, de entrada, evitar negociaciones sobre intercambio de terrenos con el Ayuntamiento de Madrid, porque cualquier espacio que este Ayuntamiento adquiera en los límites con Rivas sólo va a destinarlo a depósito de sustancias contaminantes y al desarrollo de las tareas que estén en consonancia con el vertedero de Valdemingómez, la planta de compost o las recientes escombreras, por citar algunos ejemplos, agravando además los problemas de circulación, que ya sufrimos, con el traslado por esta zona de tales materiales.

En toda la zona limítrofe con el término municipal de Madrid, necesitamos una amplia zona de seguridad. Y ésta la debe garantizar el Ayuntamiento de Rivas con actuaciones preventivas.