Una familia realojada se va de Torres tras una pelea con los vecinos
El alcalde alega que el grupo no se integraba
La tensión acumulada entre una parte de los vecinos de Torres de la Alameda (4.900 habitantes) y una familia de etnia gitana realojada en la localidad por el Instituto de Realojamiento e Integración Social (IRIS) estalló el pasado miércoles. Doce miembros de esta familia y una treintena de vecinos se enzarzaron en una pelea en la que se llegaron a exhibir armas blancas. La llegada de la Guardia Civil logró que los ánimos se calmaran. La familia realojada ha abandonado el pueblo.
Los enfrentamientos han sido frecuentes entre tres hijos de la familia y varios vecinos durante los últimos meses. Las denuncias presentadas ante la Guardia Civil contra los tres hermanos son numerosas por pequeños hurtos, amenazas y otros delitos menores, según el alcalde, Francisco Acedo, del PP. Los incidentes, afirman los vecinos, se repiten desde que la familia llegó al pueblo, hace unos dos años.
'La semana pasada pegaron a uno de nuestro grupo porque no les dejó la bici. El martes nos amenazaron, y el miércoles ya se lió el follón', explicaban ayer Luis Miguel, Sergio e Ismael, tres chavales del pueblo de 12, 13 y 15 años.
El pasado martes, el cruce de insultos frente al Ayuntamiento y la iglesia fue a más: una treintena de vecinos y doce miembros de la familia parecían decididos a enfrentarse con las manos. La llamada de un vecino a la Guardia Civil evitó que alguien resultara herido. Los agentes intervinieron antes de que la pelea empezara.
El alcalde de Torres se lamentaba ayer porque el conflicto 'se veía venir': 'Llevamos meses alertando al IRIS de que esta familia no se integraba', aseguró Francisco Acedo. 'Es una pena porque se está jugando con la convivencia del pueblo', insistió. 'Y que nadie confunda esto con racismo. Un centenar de vecinos del pueblo son gitanos', añadió el regidor.
Ismael, Luis Miguel y Sergio están de acuerdo con el alcalde, al igual que otros vecinos consultados. 'En el colegio hay muchos gitanos y son nuestros amigos', dicen los chavales.Las familias gitanas de la localidad, también: 'Vivimos en el pueblo 15 familias gitanas, y somos una parte más del pueblo que convive sin ningún problema', explicó un adulto gitano, que prefirió no dar su nombre.
La familia realojada, con la que este periódico no ha conseguido contactar, ha abandonado el municipio y se ha ido a Mejorada del Campo, donde vive el resto de su familia. Ayer por la tarde pasaron por su piso de Torres, acompañados por el alcalde, para recoger sus enseres. Una portavoz del IRIS declaró: 'Un realojamiento y la integración de una familia en una comunidad nueva es un proceso lento. Se mantiene el seguimiento adecuado y, si constatamos que la no integración de esta familia en el pueblo puede causar mayores problemas, estudiaremos el caso con atención'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.