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La Diada de Sant Fèlix reúne en Vilafranca los mejores 'castells'

Vilafranca, Minyons y Joves logran la leyenda

Vilafranca vivió ayer una pletórica exhibición castellera de Sant Fèlix, en la que se levantaron los castells más altos y difíciles jamás intentados (excepto la torre de vuit) y en la que la emoción, la rivalidad y la pugna estuvieron a flor de piel. Castellers de Vilafranca, Minyons de Terrassa y Joves de Valls dibujaron actuaciones espléndidas, mientras que la Vella rompió su buena racha de los últimos tiempos.

Un par de quatre de nou sense folre; un tres de deu amb folre i manilles; un quatre de nou amb folre i l'agulla; dos cincs de nou amb folre; dos torres de nou amb folre i manilles, dos pilars de vuit amb folre i manilles y un tres de vuit aixecat per sota fue el excelente resultado de la exhibición. La nota negativa la puso el público cuando recibió con sonoros silbidos a los Minyons de Terrassa, un hecho absolutamente inusual en una actuación castellera y que contrasta con la categoría que siempre ha distinguido a esta plaza.

La reacción del público fue en respuesta a una parodia sobre Sant Fèlix que los Minyons realizaron hace meses en el marco de una fiesta de la colla. Cada vez que la formación de Terrassa intentó ayer un castell sonaron silbidos por parte de grupos de intolerantes, que eran apagados por aplausos.

La actuación protagonizada por las cuatro colles pasará con letras de oro a la historia castellera. El hecho de que tan sólo dos de las construcciones probadas no fueran de gama extra evidencia la elevada categoría del espectáculo de primera categoría que vivió la plaza.

Los Castellers de Vilafranca abrieron plaza con el quatre de nou amb folre i l'agulla, que descargaron con seguridad. A continuación, se batieron con su gran reto de la jornada: el mastodóntico tres de deu, un castell que coronaron hace tres años y que persiguen descargar, lo cual les ha llevado a plantear un trabajo de preparación minucioso toda la temporada. El tres de deu subió con precisión, con el folre y las manilles en perfecta posición, y se logró coronar, en medio de un estallido de alegría de la plaza. Cuando bajaba la canalla, el castell se rompió en los pisos intermedios. El tres de deu sólo se ha descargado una vez en la historia, en 1998, a cargo de los Minyons.

En la tercera ronda, los verds plantaron el cinc de nou amb folre, que cargaron tras un intento desmontado. El pilar de vuit amb folre i manilles, al segundo intento, cerró su histórica exhibición.

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'Goleada' de los Minyons

Los Minyons jugaron, como nunca, en campo contrario, pero lograron golear y demostrar su alto nivel. El dos de nou amb folre i manilles de la primera ronda fue el preludio del quatre de nou sense folre que plantaron en la segunda. El castell, de extrema dificultad y que no admite ningún contratiempo, presentó problemas cuando entraba la canalla, pero lo trabajaron al límite, con coraje y técnica depurada hasta descargarlo. En tercera manga, la colla de la camisa malva coronó el pilar de vuit amb folre i manilles.

La Joves de Valls empezó con el dos de nou amb folre i manilles, que se giró bruscamente y que cedió una vez cargado. El tres de nou amb folre fue el castell de la segunda ronda, para a continuación elevar un quatre de nou sense folre que habían ensayado tímidamente, pero que no supuso un inconveniente para que el castell subiera aplomado, con valentía y decisión. El mantenimiento de la posición por parte de cada casteller fue determinante para descargarlo, no sin antes derramar un acentuado esfuerzo, premiado por una fuerte ovación.

En los últimos 100 años sólo se habían visto dos quatre de nou sense folre descargados. Ayer, en media hora fueron otros dos, a cargo de las mismas colles que ya habían efectuado tal heroicidad: los Minyons y la Joves de Valls.

La Vella cargó dos castells de notable valor -el cinc de nou amb folre y el tres de vuit per sota-, pero se quedó lejos de sus objetivos y cosechó un exceso de llenya, ya que, a los dos coronados, cabe sumar dos caídas más en los intentos de dos de nou amb folre i manilles y quatre de nou sense folre. Completó el quatre de vuit amb l'agulla.

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