Israel vuelve a utilizar aviones contra varios cuarteles de la policía palestina

Aviones de combate israelíes volvieron a bombardear ayer territorio autónomo palestino en represalia por los ataques palestinos del día anterior, en los que murieron tres soldados y dos colonos israelíes. El recurso a la Fuerza Aérea, por segunda vez desde el inicio de la Intifada, supone un salto cualtitativo en la respuesta de Israel y muestra su desprecio hacia las advertencias de la comunidad internacional. Incluso su principal aliado, Estados Unidos, condenó el uso de la aviación el pasado mayo y pidió a Ariel Sharon que midiera sus respuestas.

Sin embargo, la operación palestina del sábado contra una posición militar ha desatado las alarmas en el Ejército israelí. Los responsables militares necesitaban, por tanto, una respuesta contundente para elevar la moral. Es, además, la nueva táctica inaugurada a raíz del atentado suicida del pasado día 10 en Jerusalén. Atacar directamente en el corazón de las zonas autónomas palestinas, sin consideración hacia los Acuerdos de Oslo.

El Gobierno de Sharon ha dejado claro que, como explicó ayer su ministro de Seguridad Interior, Uzi Landau, a un grupo de expertos estadounidenses en derechos humanos, es partidario de endurecer la lucha contra los palestinos y de los asesinatos selectivos 'para salvar vidas humanas'.

El presidente egipcio, Hosni Mubarak, pidió la intervención de Estados Unidos porque 'Arafat no puede frenar por si solo la violencia'. Mubarak recordó que Israel también es responsable de lo que ocurre.

El ataque de la aviación fue acompañado de operaciones terrestres, y durante todo día hubo escaramuzas tanto en Gaza como en Cisjordania. Dos palestinos y un israelí resultaron muertos como resultado.