La Guardia Civil cierra dos explotaciones de motos acuáticas en Marbella

El plan de control de las motos acuáticas acordado el viernes entre la Guardia Civil y la Capitanía Marítima de Málaga ha comenzado a dar sus frutos. Tras las inspecciones realizadas el domingo, se procedió al cierre de dos explotaciones de Marbella que incumplían la normativa vigente.

A una, ubicada en la playa de La Víbora, la Guardia Civil le retiró la concesión y le precintó los seis vehículos de que disponía para su actividad. La otra, emplazada en la zona de El Lido, ni siquiera tenía concesión, por lo que las tres motos acuáticas con que contaba fueron trasladadas a un depósito judicial.

La Subdelegación del Gobierno informó que además de estos controles, se realizaron inspecciones entre particulares que motivaron varias intervenciones más de estos vehículos. El plan -que continuará a lo largo del verano para mejorar la seguridad de los usuarios- fue acordado a raíz de la muerte hace una semana de un joven de 21 años tras la colisión de dos motos acuáticas en San Pedro Alcántara (Marbella).

Su novia, Ainoa R. G., de 20 años, que resultó herida en el accidente y estuvo tres días en coma neurológico, abandonó ayer la unidad de cuidados intensivos del hospital Carlos Haya en el que se encuentra ingresada desde el martes pasado. Su estado sigue siendo grave, aunque según el último parte médico evoluciona de forma favorable. La enferma 'colabora' con los facultativos y está consciente, pero sus respuestas a cualquier estímulo son todavía lentas.