Edward Gierek,ex secretario general del partido comunista polaco
Edward Gierek, máximo líder de Polonia de 1970 a 1980 como secretario general del Partido Obrero Unificado (comunista), falleció el domingo a los 88 años en Cieszyn, en el sur del país, según anunció su hijo Adam, quien atribuyó la muerte a una insuficiencia pulmonar. Su familia no ha informado de cuándo será el entierro.
Nacido en Polonia en 1913, Gierek emigró junto a su familia a Francia en 1923, donde permaneció hasta 1934, trabajando en la mina desde los 13 años. Después de escalar puestos en la jerarquía del partido comunista francés, retorna a su país de origen. Tres años después marcha a Bélgica, donde sigue militando en la formación de izquierdas.
Definitivamente en Polonia desde 1948, Gierek rigió el país en la década en la que registró mayor modernización económica y social de la época comunista, así como el mayor endeudamiento de su historia. El político llegó al poder en diciembre de 1970, cuando los huelguistas de los astilleros Lenin de Gdansk y Gdynia fueron ametrallados por la policía y el ejército y murieron 43 personas. Aquella matanza hizo posible la eliminación del poder del hasta entonces principal gobernante, Wladyslaw Gomulka, hombre al que reemplazó Gierek después de conquistar el apoyo de los obreros huelguistas.
Sus primeros años en el poder estuvieron marcados por la apertura al exterior y por una prosperidad relativa debida a diversos créditos otorgados por instituciones financieras extranjeras.
Su política económica acabó siendo, sin embargo, un total fracaso -llegó la hora de cancelar las deudas y no había con qué- y condujo a Polonia a otra nueva y muy profunda crisis de la que la sociedad trató de salir con nuevas huelgas y protestas. En 1980 los movimientos de rebelión de los trabajadores condujeron al nacimiento del sindicato Solidaridad de Lech Walesa y culminaron en la destitución de Gierek de todos sus cargos, e incluso con su expulsión del partido comunista acusado de haber hundido a Polonia en el caos.
Pese a que terminó su carrera política de forma poco honrosa, los polacos y, en particular, los campesinos recuerdan la época de Gierek como una de las mejores del país y, en los sondeos, más del 50% de sus conciudadanos elogian su mandato.-
