Un incendio arrasa 67 hectáreas de un terreno de gran valor ecológico

Las torres de vigilancia de los bomberos de la Comunidad de Madrid detectaron el fuego alrededor de las dos de la tarde. También los vecinos de la zona, alertados por la densa humareda, habían comenzado a llamar al 112. El incendio quedó controlado pasadas las cinco de la tarde.

El portavoz de emergencias del 112 explicó que el fuego se inició al lado de unas casas rurales que se encuentran en la finca Fuentevieja. Las mismas fuentes informaron de que las llamas no afectaron a los inmuebles, aunque sí destruyeron otras instalaciones de la finca que se encontraban abandonadas. En Fuentevieja viven dos hermanos con sus mujeres. Uno de los propietarios de la finca, Agustín García de Mateos, comentó muy afectado la suerte que han tenido: 'He pasado verdadero agobio, porque es una finca muy combustible, con pinos, jara...'. Aseguró que si no llega a ser por la rapidez del 112 en enviar a los bomberos 'podría haber sido una catástrofe que hubiera afectado a más de 400 hectáreas, porque aquí hay zonas de bosque muy cerrado'.

A este vecino le avisó su hermano, que vive también en la propiedad, pero en otra casa. Se había desatado un fuego al lado de su vivienda y era imposible apagarlo. Agustín comenta que los daños en las viviendas no son cuantiosos. 'Parece que sólo ha afectado al garaje de la casa de mi hermano', comentó. Los bomberos investigan las causas que provocaron el desastre. Los propietarios tampoco saben el motivo que originó las llamas. 'No sé con exactitud por qué se inició el fuego, lo único que tengo claro es que no lo podíamos controlar', relató Agustín, que explicó también cómo el aire llegaba en ese momento del oeste y condujo el fuego hacia la entrada de la finca, que tiene unas trescientas hectáreas. En cuanto a los daños en el terreno, Agustín asegura que no quería verlos'. Es una finca de mis padres y es un verdadero suplicio ver cómo ha quedado.

En el momento del incendio soplaba un viento racheado que alcanzó los 50 kilómetros por hora, lo que contribuyó a propagar el fuego. Las llamas se rompieron en dos frentes, lo que dificultó las tareas de extinción. Intervinieron 5 helicópteros del 112 (con capacidad para transportar entre 1.500 y 3.500 litros de agua), 2 hidroaviones del ministerio de Medio Ambiente (transportan 5.000 litros de agua), seis retenes de la Dirección General del Medio Natural, 14 dotaciones de bomberos de la Comunidad, además de efectivos de Protección Civil, Guardia Civil, Policía Local, Insalud y Cruz Roja.

Lourdes y Carmen Marchesi, las dos hermanas que viven en la finca San Eduardo, colindante con la de Fuentevieja, fueron las únicas personas evacuadas a causa del incendio. 'Vino el sargento de la Guardia Civil y nos dijo que nos marcháramos; antes encerramos a los dos mastines en la casa, con agua, como nos dijeron', afirmaron las afectadas. Lourdes y Carmen se quejaron de que un camino público que llega a una vía pecuaria que pasa por la puerta de su finca está siempre cerrada con piedras que ponen los vecinos de una urbanización cercana para que ningún extraño entre en este terreno. El portavoz de emergencias 112 confirmó que se produjo un pequeño retraso al tener que retirar las piedras que interrumpían el paso.

La organización Ecologistas en Acción ha mostrado su preocupación por este incendio. Santiago Martín Barajas, portavoz del organismo, manifestó que es una finca de un valor ecológico excepcional. En sus terrenos habitan especies en peligro de extinción, como la cigüeña negra, muy sensibles a la presencia humana. 'El daño medioambiental es irreparable, porque es una isla entre urbanizaciones', explicó Martín Barajas, quien solicitará al Seprona que investigue 'con el máximo detalle' las causas del fuego.