El primer ministro serbio afirma que entregará más criminales de guerra a La Haya

El primer ministro serbio, Zoran Djindjic, viajó ayer a Salzburgo para dejar claro ante el Foro Económico Mundial, que se celebra en esa ciudad austriaca, que sigue controlando la situación en Belgrado tras la extradición de Milosevic al Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia.

El líder más prooccidental de la antigua oposición serbia garantizó que mantentrá e incrementará la cooperación con los jueces de La Haya, aunque advirtió que será su Gobierno el que marque el ritmo de las entregas de 'la gente de la lista': los presos reclamados por la justicia internacional.

Djindjic reveló que su Gabinete temió una reacción militar al ordenar la extradición de Milosevic. 'Estábamos preocupados por el Ejército (...), pero al final fue más fácil de lo que habíamos imaginado', explicó.

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