Fiat crea una empresa de energía para lanzar una OPA sobre la italiana Montedison

El escueto comunicado difundido al terminar la reunión no menciona expresamente la OPA, pero todo apunta a que los detalles de la misma serán dados a conocer hoy cuando se abra la Bolsa de Milán. La familia Agnelli cuenta como principal aliado en la operación con Electricité de France (EdF), dueña del 20% de Montedison.

Fiat y EdF se disponen a lanzar una OPA hostil sobre Montedison por un valor total de 5.000 millones de euros (832.000 millones de pesetas) y ofrecerán 2,9 euros por cada acción del grupo milanés. La operación será realizada por la nueva sociedad que, según el diario de la city de Londres, Financial Times, se llamará Italenergía y aglutinará todas sus participaciones en el sector de la energía. Entre sus accionistas, además de Fiat y EdF estarán los tres bancos italianos con mayor presencia en Montedison: Banca di Roma, Banca Intesa y San Paolo-Imi.

Los consejeros del grupo estuvieron reunidos apenas dos horas bajo la presidencia de Giovanni Agnelli. Un tiempo más que suficiente para dar los últimos toques a una estrategia que ha ido madurando a lo largo de las últimas semanas. Aun así, la Fiat ha optado por iniciar la ofensiva contra Montedison con pasos lentos y medidos, lo que demuestra la envergadura de la apuesta y la complejidad de la operación que ahora se inicia, que estará bajo el control, del presidente del grupo, Paolo Fresco y del consejero delegado Paolo Cantarella.

Apoyo gubernamentalLa OPA que se dispone a lanzar la Fiat cuenta, además, con el apoyo del Gobierno de centro-derecha, que siquiera por la vía de la neutralidad parece claramente favorable a la operación. Maurizio Gasparri, ministro de Comunicación declaró ayer que la única cuestión prioritaria "es que se respete el decreto aprobado por el anterior Gobierno". Es decir, el que impide a EdF funcionar como socio mayoritario de Montedison, ya que debido a su condición de empresa pública extranjera tiene el derecho de voto congelado en el 2%. Es obvio que la presencia de la familia Agnelli en el nuevo accionariado, una vez lanzada la OPA, permitirá al coloso francés soslayar este inconveniente y conquistar una parte sustancial del mercado eléctrico italiano.

Mediobanca, el banco de negocios que ha regido los destinos de Montedison en la última década, dio muestras de no estar dispuesto a quedarse de brazos cruzados ante la ofensiva de la Fiat. Los dirigentes de la entidad, con el consejero delegado Vincenzo Maranghi a la cabeza y el presidente de Montedison, Luigi Lucchini, mantuvieron ayer una reunión paralela a la de Fiat para estudiar una contraofensiva a la OPA que prepara la familia Agnelli. La decisión adoptada se supo horas después. En síntesis, Montedison se dispone a dar la batalla cediendo en primer lugar su participación en La Fondiaria (que se reducirá del 32% actual al 3%) a la compañía Sai y su participación en Dieci Srl al grupo Bollorè, por un valor global de 1.140 millones de euros (189.680 millones de pesetas). Operaciones que, según Montedison, financieramente "consentirán reducir las deudas del grupo", pero que desde un punto de vista estratégico representan un primer revés para Fiat y EdF, que han contado en todo momento con La Fondiaria a la hora de plantear la OPA sobre Montedison.

Dado el equilibrio de fuerzas entre los sectores que apoyan a Fiat y los que están con Mediobanca, es, no obstante, evidente que el margen de maniobra del banco milanés es pequeño y hace presagiar que serán Fiat y EdF los que asuman el control de Montedison.