ETA intenta matar a un vigilante de la universidad vasca con una bomba lapa

ETA intentó asesinar a un guarda jurado de la Universidad del País Vasco con una bomba lapa cargada con un kilo de explosivo. Sólo el fallo en el sistema de activación del artefacto evitó la muerte del trabajador del campus.

El vigilante descubrió la fiambrera cargada con el explosivo tras viajar con el artefacto bajo su asiento desde el campus universitario de Leioa (Vizcaya) hasta su domicilio, en Baracaldo. Los servicios de seguridad de la Universidad del País Vasco habían recibido en los últimos tiempos duras críticas de la izquierda abertzale por sus intervenciones en varias protestas estudiantiles de grupos afines a HB.

El guarda jurado contra el que atentó ayer ETA trabajaba en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunidad, el mismo centro en el que los terroristas colocaron un paquete bomba dirigido a la profesora Edurne Uriarte, militante socialista, que no llegó a explotar.

Por otra parte, el secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo, se reunió ayer con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, y le comunicó que la intención del PSE es cerrar la etapa de enfrentamiento con el PNV e iniciar un periodo de oposición 'flexible'.