Juan Dolores Caballero retoma su 'teatro bruto' con el estreno de 'SVO-ZOS'
El director pone a bailar 'La Orestiada' a personajes lisiados
Teatro El Velador, la compañía que Juan Dolores Caballero fundó en Sevilla en 1990, hizo escuela con su montaje El recreo, una pieza muy dura que se desarrolla en un manicomio y con la que el director de escena, de 42 años, sentó las bases de su teatro bruto.
'Con SVO-ZOS hemos retomado el espíritu de El recreo. Parto de que el hombre es un fallo de Dios, es un ser imperfecto, por eso mi teatro es pesimista; frente a lo que hace la mayoría que muestra, a través del teatro y de otras artes, una imagen amable de la sociedad y del hombre', dijo ayer el director de escena que ha contado para esta producción con cuatro bailarines y dos actores.
'Normalmente nos expresamos con nuestro cuerpo, pero aquí somos lisiados, tenemos limitaciones. Ha sido diferente y muy duro', comenta Judith Gómez, una de las bailarinas de danza contemporánea. En esta peculiar Orestiada, reconocible sólo en las relaciones entre los personajes, participan también Manuel Cañadas (contemporánea), José Manuel Moreno (danza clásica), Rocío Márquez (flamenco), Manuel Sala (actor) y Miguel Ángel Vargas, un director de escena que trabaja como actor por primera vez.
SVO-ZOS -se lee esbozos-, estará en La Imperdible hasta el 27 de mayo y el 1 de junio se presentará en el festival de New Castle (Reino Unido). 'Es un trabajo de investigación sobre las relaciones en la sociedad moderna. Son ideas del Sur expresadas de una forma universal', añade el marroquí Mostapha Bahja, ayudante de dirección.
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