El enviado de la ONU exige al Gobierno de Guatemala señales de su decisión de 'acabar con la impunidad'
Con un llamamiento al Gobierno de Guatemala para que demuestre, "sin lugar a dudas", su determinación de acabar con la impunidad, el relator de Justicia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el malayo Dato Param Cumaraswamy, concluyó el pasado fin de semana una visita de tres días a este país centroamericano.
"Yo insto al Gobierno de Guatemala a que demuestre públicamente, sin lugar a dudas, su determinación de acabar con la impunidad", dijo Cumaraswamy en una conferencia de prensa.
El enviado especial de la ONU comentó que, al término de su visita oficial a Guatemala, mantiene tres preocupaciones: la impunidad reinante en el país, las amenazas que reciben los jueces y el hecho de que la mayoría de las recomendaciones que planteó en su anterior visita, en 1999, no hayan merecido ninguna atención.
"Me entristece comprobar que la impunidad sigue sin ser abordada. Hay un sentir generalizado de que el Gobierno de Guatemala no tiene ninguna voluntad política para resolver este problema", subrayó Cumaraswamy.
En relación a las promesas públicas del Gobierno, en las cuales se ha comprometido a luchar en favor de la justicia, Cumaraswamy fue tajante al decir que las palabras no bastan: "No es suficiente que el Gobierno culpe a los tribunales y a los fiscales de este problema. Es necesario que el discurso se respalde con los hechos", expresó y sugirió la creación de lo que denominó "una fuerza de tarea" con los sectores de justicia, con un plazo para que se presenten resultados, y un diagnóstico acerca de la posibilidad de que los casos conocidos puedan ser resueltos. "De no aclararse, que se diga el porqué, pues la gente tiene derecho a conocer la verdad".
La visita del relator de Justicia de la ONU fue aprovechada por los periodistas locales para solicitar el nombramiento de un relator para la libertad de expresión, ante las amenazas que han recibido los informadores que han señalado actos de corrupción de altos cargos del Gobierno, militares y grupos de poder.
"En Guatemala se está desarrollando la cultura del miedo", dijo Cumaraswamy al recibir las denuncias y conocer cómo periodistas y medios escritos independientes han sido víctimas de campañas de desinformación desde el monopolio de la televisión abierta, manejada por el actual ministro de Comunicaciones, Luis Rabbé.
Visita esperanzadora
La llegada del relator de Justicia de la ONU fue calificada como positiva y esperanzadora por dirigentes de organizaciones humanitarias de Guatemala. "No sólo se escucharon quejas, también se formularon soluciones para que el relator formule sus recomendaciones a las instituciones encargadas de hacer cumplir la justicia", dijo a los periodistas Nery Rodenas, de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado.
En tanto, Eleonora Muralles, del grupo Familiares de Desaparecidos y Secuestrados, insistió en que, si en realidad se quieren cambios en el aparato de justicia, "las recomendaciones deben ser atendidas".
El delegado de la ONU calificó como "negativo" el hecho de que sus recomendaciones de 1999 no tuvieran el debido cumplimiento. Al respecto, un estudio de la fundación Myrna Mack informa de que, de las quince recomendaciones principales de Cumaraswamy, el Estado guatemalteco sólo ha trabajado en siete, sin concluir ninguna. Las áreas peor calificadas son la intimidación y amenazas contra los funcionarios de justicia y el de la lucha contra la impunidad. El análisis de la organización humanitaria señala que en estos asuntos el sistema de justicia no muestra resultados. "No hay ningún avance", puntualiza.
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