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Columna
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Siguiente paso

Mal asunto el de las cajas de ahorro sevillanas. Malo para casi todos los que están implicados en la pelea, empezando por los presidentes de dichas cajas. Ya se ha comentado desde estas mismas páginas la esperpéntica situación de unos consejos, no renovados como marca la ley, iniciando un acelerado proceso de fusión para conseguir, dicen, la undécima caja de ahorros española.

Pero malo también para el partido socialista y para el Gobierno andaluz. Habiendo conseguido con el Partido Popular un marco pacífico para el debate del sistema financiero andaluz, al PSOE le ha salido el grano más molesto en su propia piel. Tras las dos tribunas periodísticas de B & B del pasado sábado el grano se ha convertido ya en pústula. ¿Quién sajará la herida? ¿Hasta dónde llegará el conflicto de personalidad de estos dos presidentes que no saben ya si son militantes socialistas, portavoces de negocios inmobiliarios o futuros candidatos al Premio Nobel de Economía? ¿Cuál tendrá que ser el siguiente paso del Ejecutivo andaluz ante el posible conflicto legal de la fusión sin renovación de cargos?

Desgraciadamente, mucho mayor es el daño que con esta mala película se está haciendo al éxito de un proyecto cohesionador de Andalucía. La ofuscación que hay en este asunto de la fusión por reafirmar no se sabe qué intereses sevillanos, o en todo caso occidentales, parece sacar del baúl de la más rancia historia aquel invento de 'las dos Andalucías'. Si 20 años después del inicio de nuestra autonomía seguimos así, es necesario cuestionarse qué hacen nuestra clase política y nuestros líderes sociales.

Para empezar habría que demandar al PSOE sevillano, fuerza con mayoría absoluta en la provincia y gobernante de la capital, qué papel juega en toda esta película que no sea el de figurante. Es bastante penoso tener que asistir al espectáculo de que la operación más ambiciosa para conseguir poder andaluz haya sido obstaculizada por aquellos medios de comunicación y sectores sociales que nunca aplaudieron al puño y la rosa. Será que, en resumidas cuentas, algunos que están con la rosa en el fondo siempre fueron de otro jardín. Mañana martes, otra secuencia.

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