Un estudio eleva a 4.300 millones de pesetas los beneficios del premio de motociclismo de Jerez
Cada motorista gasta una media de 15.000 pesetas diarias durante el evento
Según el trabajo, cada uno de los moteros que acude a la cita de Jerez suele gastar unas 15.000 pesetas diarias de media y permanece en la zona de influencia del trazado dos días y medio. Este año se estima que podrían llegar más de 200.000 personas y 80.000 motocicletas.
A esto habría que añadir los beneficios que se generan por conceptos como los de la publicidad y la creación de puestos de trabajo. 'Estos ingresos', explica el director del Observatorio Turístico, Antonio Arcas, 'no los hemos cuantificado aún; nos hemos limitado a conocer el dinero que se gastan estos señores aquí'.
Otro de los capítulos que destaca el estudio es de la fidelidad de los visitantes durante el resto del año. Se ha disparado, de hecho, el número de valencianos y catalanes que acuden a la provincia de Cádiz en otras fechas y que aseguran haber conocido la zona por primera vez en un mundial de motociclismo.
La ocupación hotelera se encarga cada edición del Gran Premio de corroborar estos datos que ahora se hacen públicos. Al día de hoy no quedan habitaciones libres en prácticamente ningún hotel de la provincia gaditana, además de las zonas de acampada que también estarán completas. La coincidencia de las carreras con la Feria de Abril de Sevilla ha limitado la capacidad de acogida de los hoteles hispalenses, por lo que algunos aficionados están teniendo que ir a las provincias de Córdoba y Málaga para conseguir alojamiento.
Por otra parte, el Ayuntamiento de El Puerto aplicará desde hoy, 'de manera progresiva', un plan interior de tráfico para hacer frente a la masiva presencia de moteros que ocupan la ciudad, coincidiendo con la celebración del Gran Premio de Jerez.
Como en años anteriores, el acceso al casco portuense a través de Pozos Dulces estará reservado para la entrada de motos, desviándose la entrada de vehículos de cuatro ruedas hacia la zona norte de la ciudad.
En su recorrido por el casco urbano, los motociclistas encontrarán este año badenes de gran altura, instalados cada pocos metros para impedir el desarrollo de competiciones ilegales en pleno centro. Este año no se han instalado vallas de protección en las calles más afectadas (Ribera del Marisco y Micaela Aramburu), pero sí se ha establecido un circuito peatonal para permitir el tránsito a pie.
Con todo, diversas entidades vecinales han expresado sus quejas por la falta de contundencia de la administración local en la adopción de medidas que eviten los riesgos y molestias de las concentraciones moteras en las calles portuenses.
De esta manera, la plataforma local antiruidos ha pedido el cierre del centro al tráfico rodado y ha advertido su intención de recurrir ante los tribunales en defensa de los derechos que asisten a los ciudadanos.
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